Hace unos días se popularizó la bebida alcohólica Wachicoldrink, servida en galones de gasolina (pequeños), en un bar de Tulancingo, municipio vecino de Cuautepec, foco rojo en robo de combustible a nivel nacional.
Este lugar fue abierto hace dos meses por los hermanos Jairo y Jonathan luego de observar la variedad de bebidas que ofrecían en los bares de Tepito CDMX, a los que asistían cuando iban a surtirse de mercancía para su negocio de reparación de celulares y venta de ropa.
El bar Chaklones drinks ofrece no solo una presentación de bebida, añade la forma de “chupar” el ducto:
Un pedazo de manguera para absorber el tequila, la cerveza o el ron, “para que tengan toda esa experiencia de que está en verdad en el huachicol”, expresó Jonathan a la Jornada Hidalgo, vestido de encapuchado, como parte de su “concepto”, dijo.
Además, los jóvenes creadores de la nueva bebida alcohólica, ven en la simulación de un contenedor de gasolina, una manera de dejar de contaminar el ambiente con vasos desechables, porque el cliente consume, y al igual que en la venta de huachicol, se lleva el galón y regresa para volver a llenarlo.
“Como pasa en México, nos reímos de las desgracias ajenas, no lo estamos haciendo en tipo de burla, de incitarlos, simplemente fue la idea, nosotros queremos sacar uno o dos envases nuevos cada semana, en esa (Wachicoldrink) vimos una oportunidad”.
“Sabemos que está el problema (robo de combustible), y es algo delicado pero hay veces que la gente de un problema le saca provecho y a lo mejor es lo que nosotros hicimos”, reconoció Jonathan.
Luego de que la bebida ha sido tendencia nacional en redes sociales, contó que en un día (jueves de la semana pasada), el negocio Chaklones drinks vendió entre 50 y 60 galones de Wachicoldrink, cuyos precios son de 1 litro 160 pesos, 2 litros 280 y 3 litros 360.
“Nos buscaron gente de Puebla, Querétaro, Veracruz, de la Ciudad de México, Edo de México. Incluso nos han contactado de Mazatlán, que quieren que llevemos este concepto para allá, Culiacán”.
Jonathan mencionó que el Wachicoldrink, llamó la atención de los mismos huachicoleros, quienes, dijo, han acudido al establecimiento “aquí en el bar uno se da cuenta, y aquí se les atiende normal como cualquiera”.
Parece divertido, pero nos van a estigmatizar: ciudadano
“Saben lo difícil que es que una colonia, barrio o una ciudad, sus habitantes vivan estigmatizados, que digan es una región de huachicoleros y que generalicen en otros lugares, Tulancingo, región del huachicol”, cuestionó un habitante de la colonia Vicente Guerrero, donde se ubica Chaklones drinks.
“Si tan solo a veces los taxis de noche ya no quieren venir a dejar gente a algunas zonas. Como ciudadanía entendemos que podría ser la necesidad de buscar otros mercados para salir adelante, otros lo hacen por hacerse famosos, pero no miden las consecuencias, para mí eso es una apología del delito”, agregó el padre de familia.
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