Con personas adentro, autoridades municipales de Tlaxcoapan clausuraron un establecimiento que es usado como presunto centro de rehabilitación contra las adicciones, por lo que familiares de los internos rompieron los sellos para poder saber qué pasaría con sus parientes; el lugar sigue en operación.
El hecho se derivó de que, el pasado jueves, integrantes de la agrupación Tutram, del Estado de México, acusaron presuntos malos tratos contra al menos cinco internos, a quienes presuntamente se les golpeó en diversas partes del cuerpo e incluso mostraron fotografías de los hematomas e inflamaciones causadas.
Durante una trasmisión en vivo, Jorge Maya, coordinador de Transportistas Unidos Transformando México (Tutram) en Cuautitlán, dijo que familiares de uno de los internos se pusieron en contacto con ellos para exponer la situación de la que fueron víctimas sus parientes.
De ahí que la agrupación Tutram pidió la liberación de los internos, luego de exponer que presuntamente los amarran de cabeza, los golpean hasta romperles las costillas y diversos malos tratos de los que son víctimas las personas internadas ahí.
Durante su transmisión, también pidió al director de Seguridad Pública Municipal de Tlaxcoapan, Aquiles Amador Lara, que se hiciera movilización para liberar a los internos o de lo contrario, la agrupación amagaba con venir a cerrar carreteras hasta que se clausurara el establecimiento.
Sin embargo, los integrantes de la agrupación solo llegaron a Tulancingo derivado de que les informó que las autoridades municipales presuntamente hicieron un operativo para liberar a los internos y clausurar el establecimiento, sin embargo, y aunque sí hubo operativo, no se cumplieron las demandas de la agrupación.
Por lo que, familiares de los afectados acusaron que el director de Reglamentos y Espectáculos, Lino Meza Hernández, quien tiene la facultad de clausurar el establecimiento, no quiso hacerlo presuntamente por recibir moches por parte de las personas que operan el Centro contra las adicciones.
Fue hasta el día sábado que Tutram se enteró que no se habían cumplido sus peticiones y volvieron a hacer un llamado para cumplir con lo pactado, por ello la mañana de ayer, funcionarios de la presidencia municipal de Tlaxcoapan efectuaron una diligencia para clausurar el establecimiento.
Sin embargo, los familiares acusan que la clausura se vio envuelta en varias irregularidades, entre ellas, que el establecimiento fue cerrado con los internos todavía adentro, por lo que se tuvieron que romper los sellos.
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