Carlos Camacho

Abuso de autoridad

Es inaceptable por el lado que se mire, la prepotencia, el abuso de autoridad y de la fuerza para someter a una pareja que cometió el “delito” de no regularizar el permiso para que funcione su negocio, hecho que evidenció a un gobierno municipal de Pachuca, insensible, autoritario, alejado de la ciudadanía y sus necesidades. 

Gracias a las “benditas redes sociales”, la actuación de dos funcionarios municipales y, sobre todo, de las policías de la Secretaría de Seguridad Pública del Municipio de Pachuca, se hizo viral en todo el país y obligó al alcalde Sergio Baños Rubio a actuar en consecuencia, anunciando la baja de un director de seguridad pública y la suspensión de las tres mujeres que aparecen en el video sometiendo con lujo de violencia a la dueña de un negocio de esta capital hidalguense. 

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Martha Posadas Manzano consideró insuficiente la actuación del presidente municipal, quien se tomó una foto con los afectados por los abusos de sus policías, y advirtió que demandará por lesiones, allanamiento, abuso de autoridad y lo que resulte a quienes resulten responsables. 

El alcalde se limitó a sancionar a un directivo de Seguridad Pública y suspender a las tres mujeres policías, mientras se investiga y se deslindan responsabilidades, pero no actuó contra el director de reglamentos ni el director de Protección Civil, uno su protegido y el otro, hijo del alcalde suplente, Benjamín Rico Moreno, quienes en “cumplimiento de su deber” pidieron el apoyo de los uniformados para someter a la dueña de un negocio que se retrasó en la actualización de su permiso para funcionar. 

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Nadie desconoce que la titular de Seguridad Pública, titulada como licenciada en Educación Física, Adriana Yamilet Salazar Márquez, no obedece a las indicaciones de su jefe el alcalde pachuqueño, sino que le reporta a su jefe real, el secretario de seguridad Pública del Estado de Hidalgo, Mauricio Delmar Saavedra, para quien el estado vive en paz y cuando ocurre un evento delictivo que sacude a la sociedad, lo considera como “un hecho aislado”. 

Por lo que se observa, hay temas que se le van de las manos al presidente Sergio Baños quien, dicen sus cercanos, “no se deja ayudar”, no escucha ni acepta opiniones o sugerencias porque “el presidente es él”. 


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