El nieto del exprocurador Jesús Murillo Karam, Gerardo Saade Murillo, tramitó un juicio de amparo para poder recuperar el vehículo Chevrolet implicado en la causa penal 899/2021, en la que se investiga el atentado que sufrió Sergio Beltrán Merino, exesposo de la secretaria general del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Carolina Viggiano Austria.
De acuerdo con el expediente 1241/2023 ingresado en el juzgado Tercero de Distrito de Hidalgo, Carlos Jaime Pratt Straffon, en su calidad de defensor particular de Gerardo Saade, solicitó la protección de la justicia federal contra actos de la jueza penal de Control, Janeth Montiel Mendoza, por la determinación del 27 de junio dictada dentro de la causa penal 899/2021.
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Esto, toda vez que realizó la solicitud de nulidad sobre el aseguramiento del vehículo Chevrolet, tipo beat, color gris, placas RCD532C.
Ese 27 de junio, la jueza de Control declaró la no vinculación a proceso de Saade Kuri, ya que el Ministerio Público no acreditó la presunta participación del nieto del exprocurador en el atentado que sufrió el abogado el 5 de octubre de 2021 afuera de su despacho y que lo mantuvo al borde de la muerte por varios meses.
Según una investigación de Aristegui Noticias, en mayo de 2022 fueron detenidos los autores materiales del ilícito: Diego Mauricio Aburto, quien conducía el vehículo en el que llegó y huyó el tirador que atentó contra la víctima; Mauricio González Acosta, alias el Tijuano, el sicario que disparó al menos seis veces contra el abogado, y Alejandro “N”, alias Pato, quien contrató a los dos anteriores.
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Además, este último ayudó a escapar a sus cómplices en un segundo vehículo que se utilizó para estorbar el tráfico y dar el aviso de que el abogado ya había llegado a su despacho; el nieto de Murillo habría pagado 150 mil pesos por el “trabajo” en contra de Sergio Beltrán, el padrastro de su esposa.
Dos de los autores materiales, el chofer y el tirador, se declararon penalmente responsables del delito de tentativa de homicidio doloso calificado en un procedimiento abreviado, por lo que fueron condenados a 11 años, un mes y 10 días de prisión.
En tanto, a petición de la Procuraduría, se giraron alertas migratorias y una notificación de color rojo para la inmediata localización y captura de Saade Murillo.
En junio fue detenido y el 23 dio comienzo la audiencia inicial, pero se acogió a la duplicidad del término y se le dictó la medida de prisión preventiva.
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