Sin que sea un resultado concluyente en el caso del fallecimiento de Yolanda Martínez Cadena, la primera línea de investigación apunta hacia un suicidio, de acuerdo a información proporcionada por el fiscal de Ministerios Públicos, Luis Enrique Orozco Suárez.
En conferencia de prensa conjunta con la fiscal Especializada en Feminicidios y Delitos cometidos contra las Mujeres, Griselda Núñez Espinoza, se detalló que el cuerpo de Yolanda no presenta hasta el momento algún indicio de lesiones o tortura.
Orozco Suárez dio a conocer que pese a que aún no terminan las investigaciones, se ha consolidado la línea de investigación orientada a que la joven Yolanda Martínez se suicidó y no fue víctima de feminicidio.
“Conforme se ha avanzado la investigación y el análisis de pruebas periciales, se ha ido fortaleciendo la teoría de un suicidio; insisto, esta no es una conclusión, sino expresarles los motivos o indicios que llevan a orientar a la línea de investigación de un suicidio en este caso”, mencionó.
El vicefiscal explicó que en la zona del hallazgo no se encontraron casquillos, armas, cuerdas o cualquier otro elemento para agredir, tampoco huellas de alguna presencia humana, además de Yolanda Martínez.
“Es importante decirles, no se encontraron pertenencias de alguna otra persona, pues como se informó y se reitera en este momento, las pertenencias localizadas se encontraron íntegras”, dijo.
Asimismo, detalló que está en proceso la autopsia, pues por el grado de descomposición que presentaba el cuerpo es necesario acudir a peritos de otros lugares. “Los elementos que recolectaron los peritos médicos forenses no han sido suficientes para establecer una causa de muerte, por lo que se analiza la posibilidad de designar peritos especialistas de otro país para determinar la causa de muerte”.
De acuerdo a Orozco Suárez, en la zona donde se localizó el cuerpo de Yolanda se encontró un vaso de unicel con las frases; “Te amo Negrito”, “Ya me voy, te voy a extrañar” y “Márcame Guapo”, por lo que se procederá a analizar la grafología, grafoscopía y dactilografía para conocer si fueron escritos por Yolanda, y si hay huellas dactilares.
También se localizaron dos botes de agua embotellada, un recipiente alargado con la leyenda “Peligro”, el cual podría contener fósforo de aluminio, además se localizó también la bolsa de mano en color negra, un celular, ropa y las identificaciones de Yolanda, entre otras cosas.
Por otra parte, Eduardo Martínez, abuelo de la joven, sostuvo que su nieta pidió refugio en su domicilio ubicado en la colonia Constituyentes de Querétaro, en San Nicolás, porque no quería vivir en la casa de su padre, ubicada en la colonia Hacienda San José, en Juárez.
“Ella estuvo aquí tres días: lunes, martes y miércoles, el jueves salió y ya no volvió”, contó. “Durmió tres días en la misma cama con su hermana Vanesa.
“Allá en Juárez la regañaban porque no trabajaba y porque su hija estaba con el papá”, agregó el familiar de Yolanda.
“Todos sus amigos y su vida estaba en Juárez, busquen a sus ex compañeros de trabajo en Kemet, ahí van a encontrar más datos”, señaló el abuelo Eduardo Martínez. “Ella no se envenenó, eso es seguro”.
Por Raúl Robledo, corresponsal / La Jornada
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