Este martes inició la audiencia de apertura de debate por el triple feminicidio y aborto forzado ocurrido el 30 de julio de 2024, en la colonia San Isidro de Santiago Tulantepec.
Tras más de un año del crimen, la fase judicial comenzó con un revés, ya que la parte acusada solicitó un receso.
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El trágico suceso conmocionó a la comunidad, cuando las hermanas Guadalupe y Yessenia, y su amiga Vivian fueron brutalmente violentadas y degolladas en su domicilio.
La falta de avance en el caso ha generado frustración entre familiares y amigos de las tres víctimas.
Con cartulinas pegadas en la entrada de los Juzgados Penales de Control, Juicio Oral y Ejecución de Tulancingo, que mostraban consignas como “14 meses sin justicia” y “ya son 6 audiencias canceladas”, “ni una menos”, exigieron que se aplique la pena máxima a los responsables y que se realice una investigación exhaustiva y con perspectiva de género.
El proceso judicial por el triple feminicidio de Santiago Tulantepec ha sufrido constantes retrasos. La dilación en la justicia se debe, en gran medida, a los frecuentes cambios de defensa legal por parte de los acusados, lo que ha provocado el aplazamiento de las audiencias.
Los detenidos, identificados con las iniciales RGY (alias Richard), O.Y.C., así como una mujer de iniciales D.G.C., fueron vinculados a proceso el 15 de agosto de 2024, estableciéndose un plazo de cuatro meses para la investigación.
A más de un año del crimen, en esta fase del proceso judicial se deben presentar testigos y evidencias. El caso, que ha enfrentado múltiples obstáculos en su proceso legal, tiene como fecha límite para ser resuelto el próximo 11 de agosto de 2026.
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