La jefatura priista de Hidalgo definió sus tres candidaturas a diputados federales sin sorpresa alguna. Habrá que esperar quiénes serán los suplentes y cómo define las candidaturas a diputados locales, en las que jugarán varios de los 17 aspirantes que se inscribieron para buscar una curul en San Lázaro; así que se considera la decisión de normal.
En Pachuca era claro que sería Benjamín Rico Moreno, tras alcanzar como suplente a presidente municipal de Pachuca un fuerte posicionamiento que lo hace de ganar, pieza estratégica en el ajedrez del gobernador Omar Fayad Meneses, que aumenta el número de cuadros y perfiles con los que el Revolucionario Institucional (PRI) contará para el 2022.
En Huejutla, la definición de género fue definitiva y el PRI sigue apostando a las mujeres que le han dado buenos resultados en los últimos procesos, ahora con la ex secretaria de Educación Sayonara Vargas Rodríguez, que perdió en 2018 y que debe aprovechar el trabajo político de los últimos dos años para llegar a San Lázaro y formar parte de la estrategia priista hacia la renovación de poderes.
La decisión en Tepeapulco no era la más esperada porque había aspirantes con mayor oficio que Héctor Meneses Arrieta; ahora que nadie se sorprenda si en las siguientes semanas aparece un par de priistas postulados por los partidos Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD), posibilidad seria que está en negociación.
En este escenario, queda claro que Erika Rodríguez Hernández y Julio Valera Piedras continuarán en el Comité Directivo Estatal (CDE) para mantener la dinámica en la operación política partidista que ofreció buenos resultados en las elecciones municipales que reposicionaron al PRI y que de mantener la tendencia en las preferencias electorales aumentarán las posibilidades de obtener otro triunfo electoral.
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