Política y Paridad: El Cambio Imparable en Hidalgo

Si bien hemos avanzado a grandes pasos en la equidad de género en muchos aspectos de nuestra sociedad, la política, ese campo que determina el rumbo de nuestro estado, aún es un terreno escabroso para muchas mujeres. Pero, ¿es esto un reflejo de la realidad hidalguense, o es una reminiscencia de políticas y actitudes del pasado?

No podemos hablar de avances sin mencionar uno histórico: bajo el mando del gobernador Menchaca, Hidalgo ha sido testigo de su primer gobierno paritario. Esto no es un logro menor. Es el resultado de años de lucha, esfuerzo y, sobre todo, convicción en la idea de que las mujeres no sólo deben tener, sino que merecen un espacio equitativo en la toma de decisiones.

Sin embargo, el camino hasta aquí no ha sido fácil. Durante décadas, el escenario político ha sido dominado predominantemente por hombres, donde las mujeres, a pesar de tener las habilidades, la preparación y la pasión necesarias, se han visto relegadas a roles secundarios. Es lo que popularmente se conoce como el “techo de cristal”, una barrera invisible pero persistente que impide que las mujeres alcancen los puestos más altos del poder político.

A pesar de estos obstáculos, las mujeres hidalguenses no han permanecido calladas. Su voz, aunque a menudo sofocada, siempre ha estado presente, exigiendo igualdad, respeto y oportunidades. La paridad en el gobierno del Lic. Julio Menchaca es un claro indicativo de que las cosas están cambiando.

La paridad en cargos políticos es un gran paso, pero no es el destino final. Es necesario que las mujeres no sólo ocupen cargos, sino que también puedan ejercerlos libremente, sin miedo a la discriminación, el acoso o la difamación. Además, es vital que las políticas públicas se diseñen con una perspectiva de género, reconociendo y atendiendo las problemáticas específicas que enfrentan las mujeres en nuestra sociedad.

Es tiempo de que Hidalgo no sólo reconozca, sino celebre y aproveche el potencial de sus mujeres. El verdadero desarrollo y progreso sólo se alcanzarán cuando ambos géneros trabajen de la mano, en igualdad de condiciones. Es momento de romper, definitivamente, ese techo de cristal.

Para lograrlo, propongo:

1. **Capacitación y Mentoría:** Establecer programas que preparen a las mujeres en áreas políticas, desde cómo realizar campañas hasta la elaboración de políticas públicas con enfoque de género.

2. **Leyes Más Estrictas:** Sancionar de manera severa cualquier forma de discriminación o acoso hacia las mujeres en el ámbito político.

3. **Fomento a la Participación Activa:** Crear programas de incentivo para que más mujeres participen activamente en política, no sólo como candidatas, sino también como electoras informadas.

Hidalgo tiene la oportunidad de ser un referente nacional en términos de equidad de género en política. Con esfuerzo, determinación y, sobre todo, unión, podemos lograrlo. Es hora de que el techo de cristal se convierta en una reliquia del pasado. ¡Actuemos ahora!