Por falta de infraestructura, obras inconclusas, diseños deficientes o el alto costo de la luz, el 72 por ciento de las plantas de tratamiento de aguas residuales que existen en Hidalgo, no están operando, informó la diputada Citlali Jaramillo Ramírez.
La legisladora dio a conocer que Hidalgo cuenta con un total de 311 plantas de tratamiento de aguas residuales, sin embargo, 222 se encuentran fuera de funcionamiento y 89 si están en operación, es decir, apenas el 28 por ciento.
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Con base en datos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), en el 2021, el caudal de aguas tratadas de Hidalgo era de 30 mil litros por segundo, pero de éstos, la planta ubicad en Atotonilco de Tula trataba 28 mil litros por segundo, es decir, el 98 por ciento.
Expuso que además de los problemas con la infraestructura, no se cuenta con el recurso para operarlas por lo cual propuso al Congreso de Hidalgo a exhortar a los presidentes municipales a destinar recursos, diseñar políticas y estrategias que permitan el saneamiento de las aguas y un medio ambiente sano.
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Aunque dio a conocer que dentro del Presupuesto de Egresos para el ejercicio fiscal 2024, el gobernador Julio Menchaca contempló una partida de recursos para las plantas tratadoras, pidió que los ayuntamientos también destinen una parte del recurso para la rehabilitación y funcionamiento de sus plantas tratadoras de aguas residuales.
“Resulta urgente que se empiecen a generar planes y acciones en materia de saneamiento en el cual están involucrados sociedad, gobierno… ya que el cuidado del agua es un tema que hoy que está cobrando vidas”, señaló.
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