“Vean ustedes las calles, vean ustedes los servicios, juzguen ustedes”, fue lo que respondió Jorge Alberto Reyes Hernández, cuando reporteros le preguntaron sobre el estado en que recibirá a la capital del estado.
Y sí, no hay más que salir a las calles para percibir que, después de la algarabía que distinguió a la ceremonia en que recibió formalmente el cargo de alcalde de Pachuca, la cuesta será larga, al menos lo que resta del año.
La primera piedra en el camino será el presupuesto que tendrá para administrar la ciudad lo que resta del año. Según el alcalde saliente, Sergio Baños, le dejará a su sucesor 300 millones de pesos que serán insuficientes, como ya declaró el propio Reyes en entrevista.
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“Yo les puedo asegurar que no es así, aunado a que, si esa fuera la cifra, debe servir para pagar aguinaldos, nómina, sindicato y el gasto corriente”. Dicho en otras palabras, al menos lo que resta del año, el nuevo gobierno carecerá de dinero para echar a andar las obras que los pachuqueños esperan con ansiedad, situación que el nuevo edil morenista deberá saber comunicar, para que la frustración de la ciudadanía no se le vuelva en su contra.
La victoria contundente que obtuvo el morenista Jorge Reyes no es coincidencia. Detrás está el descontento de los capitalinos que han visto como se ha deteriorado la ciudad en los últimos años. No sólo las calles se encuentran en abandono, también servicios básicos como la recolección de basura y el suministro de agua potable.
El haber superado dos a uno a Benjamín Rico, su más cercano contrincante en la pasada elección municipal, fue una clara muestra de rechazo al expriista Sergio Baños, quien en campaña dijo que repararía e iluminaría las calles, pero que en su gobierno hizo todo lo contrario.
La situación en el vecino municipio de Mineral de la Reforma no es muy diferente. El morenista Eduardo Medécigo mandó a hacer un estudio de necesidades a la firma Blanco & Asociados, cuyos resultados serán la guía para priorizar sus primeras acciones de gobierno.
El estudio muestra que lo que más desean los reformenses es seguridad, seguido de agua y recolección de basura. “Son los temas que deben abordarse de manera inmediata” adelantó el nuevo alcalde, luego de presentar a su equipo de trabajo.
Pachuca y Mineral de la Reforma enfrentan una situación compleja, debido a gobiernos que se acostumbraron a guarecerse bajo el manto protector del ejecutivo estatal y que poco hicieron para salir adelante con sus propios recursos.
La expectativa ciudadana es alta, y los que llegan al poder deberán ser muy creativos para estar a la altura de lo que la gente espera durante los primeros meses de gobierno, hasta en tanto puedan diseñar su propio presupuesto.
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