Carlos Camacho Balcón Político

Más Sobre el Caso Zimapán

La diputada local de Morena, con representación en el distrito de Zimapán, Alhely Medina abrió una página más al complicado caso Zimapán, que tiene que ver con el presunto abuso contra dos menores de edad y que ha dividido a una familia, desde hace más de dos años.

La legisladora local solicitó una segunda licencia a su cargo por 30 días más y a través de sus redes sociales, negó ser una “prófuga de la justicia”, luego que el periodista Axel Chávez, divulgó que se emitió una alerta migratoria y una ficha roja de la Interpol para Arturo Williams Trejo Leal, su esposa Bertha Eva Medina, la propia legisladora y otras dos personas más, involucradas en el presunto abuso sexual de las sobrinas de Williams Trejo y Eva Medina.

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El asunto, ha alcanzado difusión nacional, luego que se ventiló en la conferencia “la mañanera del pueblo”, que ofrece de lunes a viernes la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y que se volvió un escándalo en Hidalgo, cuando un grupo de transportistas bloqueó los accesos a la capital del estado y se plantó en la sede del poder ejecutivo de Hidalgo, para exigir justicia en favor de las dos menores, presuntamente abusadas sexualmente por sus parientes.

Hasta hace unas semanas, la pareja formada por Arturo Trejo y su esposa Eva Medina, insistió con diversos medios de comunicación en mostrar documentos que, a su juicio, probaban su inocencia, y señalaban irregularidades en el proceso, particularmente los relacionados con peritajes, presuntamente manipulados para hacerlos ver como los responsables de los abusos en contra de sus sobrinas.

Sin embargo, no lograron su propósito y, peor aún, fue involucrada la legisladora local, quien hace un mes pidió licencia a su cargo por 30 días y ayer promovió otro permiso más, aunque no ha acudido a las instancias legales para demostrar que nada tiene qué ver con el asunto.

En las redes sociales, asegura contar con una suspensión definitiva otorgada por un juez federal que evita su detención y asegura que hay una narrativa fragmentada del caso Zimapán que omite elementos cruciales para el esclarecimiento del polémico caso.

También asegura que detrás de esto hay intereses políticos y económicos que buscan perjudicarla a ella, su hermana y su cuñado.

Una trama espinosa a la que aún no se le ve fin.


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