En el corazón de México, el estado de Hidalgo está forjando un camino innovador y efectivo en política social. Bajo la consigna de nuestro Gobernador Julio Menchaca, “primero el pueblo”, estamos replanteando cómo abordar el bienestar y la inclusión social de nuestros ciudadanos.
La transparencia es la piedra angular de esta nueva administración. Atrás quedaron los días en que los fondos de bienestar se manejaban en efectivo, un método que no solo es anticuado, sino que también abre la puerta a la malversación y la falta de transparencia. Hoy, cada peso y centavo del presupuesto está destinado a quienes más lo necesitan y su distribución se realiza de manera transparente y eficiente.
Reflexionemos sobre el pasado. En 2021, se invirtieron solamente $4,000,000.00 en los programas de bienestar, ya que el resto del recurso presupuestado para ese año se perdió con las cuentas de Gobierno del banco Accendo. Este capital, solo abarcó áreas urbanas como Pachuca y Mineral de la Reforma. La cobertura limitada de estos programas dejó a muchos hidalguenses fuera del alcance de beneficios esenciales.
Contrastando con la administración anterior, nuestros programas actuales tienen una cobertura del 100% en los municipios del estado. Hemos aumentado considerablemente la inversión en áreas de alta y muy alta marginación. Hasta el momento, en solo el primer semestre del 2023, hemos invertido más de 51 millones de pesos en nuestros municipios más necesitados, beneficiando a más de 6,152 hidalguenses, a diferencia de los 7 millones invertidos en el primer año de la administración anterior (2017) en estos mismos municipios.
Asimismo, es importante mencionar que, en 2017, el primer año de la administración anterior, cinco de los diez municipios más pobres del estado, según el CONEVAL, no recibieron ningún tipo de beneficio. Hoy, en 2023, hemos revertido esta situación. Más de 3500 habitantes de esos mismos municipios son beneficiarios directos de nuestros programas, con una inversión superior a los 24 millones de pesos.
Además, nuestras unidades móviles para atención médica de la Secretaría, estuvieron más de dos años paradas, ahora son un pilar fundamental de nuestro trabajo. Con su ayuda, hemos logrado recorrer más de 15 municipios, centrándonos en aquellos con alta y muy alta marginación, a través de las “Brigadas del Bienestar por la Salud”.
En resumen, la nueva administración está cumpliendo con su promesa de poner “primero al pueblo”. La mejora en la transparencia, cobertura y focalización de nuestros programas de bienestar es evidente. Sin embargo, no nos quedamos aquí, este es solo el inicio de un camino hacia una política social más inclusiva y eficiente.
Estamos comprometidos con el progreso y la equidad, y seguiremos esforzándonos para que cada hidalguense pueda acceder a una vida digna. En la Secretaría de Bienestar e Inclusión Social, estamos demostrando que el cambio es más que palabras, es una realidad tangible y en constante crecimiento.