Qué tiempos aquellos cuando se esperaban las vacaciones de verano para visitar a la familia, convivir con los parientes e ir a algún destino preferentemente turístico, pero desde la llegada de la pandemia, el mundo cambia sus formas de vivir y convivir.
Uno de los periodos vacacionales escolares más largos del año es el de verano y por tercer año consecutivo se ve atropellado por la pandemia, es importantísimo tener periodos de descanso académico, porque ayudan a prevenir estrés u otras patologías relacionadas, se recupera energía, incrementa la motivación y en general suelen acrecentar el rendimiento escolar.
Las vacaciones representan un oasis de descanso y con la pandemia no es la excepción, algunos refieren que con apagar sus dispositivos electrónicos es más que suficiente, en paralelo hay quienes se mueven y otros más optan por permanecer en el lugar más seguro que es la casa.
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Seguimos en medio de la incertidumbre de una pandemia donde las vacaciones no son vacaciones en el amplio sentido de la expresión, las formas de disfrutarlas han cambiado radicalmente y debemos afrontar esta nueva realidad, donde, por si fuera poco, estamos haciendo frente a la quinta ola.
Como la movilidad no está estrictamente limitada, en estas vacaciones las realidades son muchas, mientras unos piensan en salir o ya vacacionaron cerca o lejos, tomando su auto o un avión, otros están concentrados en no perder su empleo o que no se cierren sus fuentes de trabajo y desafortunadamente otros más están luchando contra el virus.
Para los estudiantes, este periodo representa la posibilidad de disfrutar horarios más flexibles y relajados y la ausencia de la práctica escolar reducen el estrés y la ansiedad, el cambiar de ambiente y rutinas incrementa la creatividad, las vacaciones siempre serán en extremo importantes para la salud integral del alumnado.
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En estos últimos años donde los estudiantes fueron sometidos a cambios tan drásticos como perder su ambiente escolar y estar estudiando desde casa, o quienes experimentan sentimientos como miedo, frustración, dolor y mucho más por la pandemia, es determinante que las vacaciones sean para ellos una corriente de aire fresco que les proporcione un hondo respiro.
Es complejo realizar recomendaciones para pasar las vacaciones en casa ya que las circunstancias y condiciones son abismalmente diversas, pero puede ayudar a que tu estancia sea más entretenida y divertida por ejemplo aprender algo que te gusta por internet (las opciones se han incrementado y diversificado a raíz de la pandemia).
También se recomienda dormir solo lo necesario; preparar recetas especiales; ordenar cajones, alacena, ropero o algo que hayas dejado pendiente; disfrutar de la lectura; ponerte al día con tus series o películas favoritas; el esparcimiento y relajación son determinantes; el dilema de estudiar o no en vacaciones es muy antiguo y tiene que ver entre otros factores con el interés del alumno y las expectativas y posibilidades de los padres.
La naturaleza aporta mucha energía, una buena opción es disfrutar de esos lugares cercanos para caminar, pasear a tu perro, dar una vuelta en bicicleta o ejercitarte, siempre manteniendo las medidas de seguridad sanitaria.
Además, estas vacaciones nos pueden ayudar a replantear nuestro desempeño escolar y vislumbrar un nuevo ciclo, sea cual fuere la forma en que pasaremos estas vacaciones de verano, no pierdan de vista cosas: seguridad sanitaria, esparcimiento y descanso.