Hospedaje en Hidalgo: plataformas u hoteles, ¿qué retos enfrentan?

El precio del hospedaje es un factor importante al momento de hacer una reservación, pero ante el incremento de estancias en renta por medio de plataformas, los hoteleros ven una competencia desleal, ya que estos servicios no cumplen con todas las normas sanitarias y de seguridad, ni deben pagar los impuestos a los que ellos están.

Airbnb es la plataforma más conocida para el servicio de alojamientos, y en Hidalgo tiene presencia en zonas turísticas y urbanas como los pueblos mágicos, la zona metropolitana de Pachuca, Tulancingo y Tula, entre otros municipios.

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Quienes hacen uso de ella, obtienen ingresos adicionales por la renta de habitaciones, departamentos, casas o cabañas que generalmente no utilizan o no fueron construidas para este fin; en tanto que, para el sector hotelero, representa su principal fuente de ingresos, están obligados a cumplir con el pago de impuestos y de nómina, y demás obligaciones como empresas.

Hidalgo no regula las plataformas: AMHMEH

Roxana Vargas Juárez, presidenta de la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles de Hidalgo aseguró que, aunque el perfil del huésped es distinto para hoteles y alojamiento de plataforma, lo consideran una competencia desleal pues no están obligados a pagar impuestos que se traducen en recursos para la entidad, y tampoco son supervisados por autoridades sanitarias o de protección civil.

“No son objetos de estas revisiones constantes de la autoridad y eso hace que los costos sean más bajos que los nuestros, no tienen entradas y salidas de emergencia, extintores… a nosotros nos revisan que las instalaciones de gas estén seguras, señalamientos, regulación de temperaturas, calderas, entre otras cosas” mencionó.

Pidió a las autoridades de Protección Civil, la Secretaría de Finanzas y de Turismo, trabajar en coordinación con el sector hotelero de la entidad para lograr un censo de cuantos establecimientos de este tipo hay en la entidad y partir para una regulación legislativa con el Congreso del Estado.

Roxana Vargas Juárez, presidenta de la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles de Hidalgo

“Son diferentes áreas las que de entrada tendrían que intervenir para hacer la regulación, por lo que se debe empezar es hacer un censo, porque ni siquiera se sabe cuantas propiedades o cuantas habitaciones hay en los destinos”, señaló.

Aunque no han cuantificado el impacto de los servicios de Airbnb al sector, dijo que su mercado ha crecido sin esta regulación al igual que los servicios de renta de cabañas que se ofrecen por redes sociales, sin dar certeza a los usuarios en cuestiones de seguridad, higiene o calidad en el servicio.

Por ello, y en tanto se logra, aseguró que el sector garantiza a sus clientes la calidad en el servicio, pero insistirán porque Hidalgo se sume a estados como Baja California, Quintana Roo o Yucatán que aplican el impuesto al hospedaje a las plataformas.

Con plataforma ganancias son hasta 80% superiores  

Daniel hace uso de la plataforma Airbnb desde hace cinco años y aseguró que los beneficios son muy amplios comparado con las rentas tradicionales pues, de manera particular, el beneficio que obtiene por alquilar una habitación en su domicilio es hasta un 80 por ciento más de lo que obtiene por las rentas convencionales.

Aunado a ello, la aplicación otorga un seguro a los anfitriones el cual cubre ciertos montos en caso de robo, como lo ocurrido en septiembre pasado en un domicilio en Mineral de la Reforma, independientemente de la seguridad que puedan poner los propietarios como cámaras de vigilancia o contratar un seguro de vivienda.

Además, ofrece otros candados de seguridad como impedir que se contacten las partes involucradas directamente antes de concretar la reservación, y obliga a hacer las transacciones económicas en la plataforma, por lo que el pago está asegurado.

Daniel explicó que otros beneficios de la plataforma es que ofrece cursos o talleres de capacitación en buenas prácticas para mejorar el servicio que ofrecen a sus huéspedes.

Pese a lo positivo que resulta para él estar dentro de este servicio de hospedaje, reconoció que sus ganancias de Airbnb son apenas el 25 por ciento de su economía, ya que Pachuca no es una principal zona turística en el país y sus clientes llegan por cuestiones familiares, personales o de negocios, contrario a lo que ocurre en playas.

No obstante, la inversión inicial que realizó fue de apenas unos 15 mil pesos para adecuar el espacio, “en la compra del colchón, sábanas, boiler”, los cuales recuperó en aproximadamente mes y medio pues su demanda va de un 20 por ciento en temporada baja y de hasta un 90 por ciento en fines de semana largos o vacaciones.

Su estancia se trata de una habitación independiente a siete minutos del Reloj Monumental de Pachuca, con cercanía a plazas comerciales, cine, supermercado y restaurantes de cadena, además de acceso rápido al transporte público.

Plataformas dan precios hasta 50% más baratos

En Pachuca, la plataforma de Airbnb ofrece más de 900 opciones para reservación, las cuales van desde habitaciones, departamentos o casas, y en zonas turísticas como Huasca de Ocampo la oferta es cercana a las 500 propuestas, en su mayoría servicios de cabañas, aunque estas cifran disminuyen dependiendo el número de personas, y si es con niños o con mascotas.

Las tarifas por una estancia para dos adultos y dos niños van desde los 700 hasta los 2 mil pesos, pero en la mayoría se incluye sala y cocina.

En el caso de los hoteles, la estancia para dos adultos y dos niños oscila entre los 1 mil 400 pesos hasta los 2 mil 300 pesos, precio que varia dependiendo del hotel y su ubicación.

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Buscan hotel por comodidad y plataforma por economía

A pesar de lo económico que puede resultar alojarse en una vivienda promocionada en plataforma de alojamiento, los huéspedes se inclinan más por los hoteles si el objetivo es buscar la comodidad, ya que en la mayoría de los casos se encuentran con circunstancias que impiden tener una estancia agradable, tales como los vecinos, el mobiliario, la atención, entre otras cuestiones.

Según las reseñas de clientes de hoteles, las principales inconformidades radican en la atención de los trabajadores, mientras que en los alojamientos en viviendas suele ser por suciedad en los muebles o en la ropa de cama o ruido de vecinos.