En nuestra vida hay muchos atributos que nos marcan en lo profesional y en lo personal, cuando nos referimos a alguien solemos destacar sus particularidades y es muy probable destacar las cualidades que nos definen como seres humanos.
Las habilidades blandas también conocidas como habilidades del siglo XXI, habilidades suaves, competencias blandas o simplemente son referidas en español por su famosa denominación en inglés “Soft skills” son aquellas propiedades personales o sociales que desarrolla cada individuo, son esenciales para el éxito en la escuela, el trabajo y la vida.
A diferencia de las habilidades duras que tienen que ver con la experiencia y el conocimiento académico curricular obtenido durante el proceso formativo formal, las blandas, son aquellas que se relacionan con la práctica integrada de aptitudes, inteligencia emocional, rasgos de personalidad, relación con otras personas y valores adquiridos entre otras.
En lo académico resultan tan importantes las habilidades duras como las blandas, y es de vital importancia incluirlas en los procesos formativos, no solo se trata de brindarle conocimiento al alumnado, sino de hacerlos crecer como personas.
Las habilidades blandas duran toda la vida, pero son difíciles de adquirir, los niños suelen desarrollarlas de manera natural relacionándose con otras personas y si una persona no las posee, puede entrenarse para desarrollarlas como son: habilidades comunicativas, liderazgo, responsabilidad, proactividad, creatividad, honestidad, adaptación al cambio, trabajo en equipo, resolución de problemas, gestión del tiempo, capacidad de organización y empatía, entre otras.
Esta combinación de habilidades sociales y de comunicación, así como los rasgos de personalidad ya mencionados, facultan a las personas para trabajar junto a otros con mejores resultados y para moverse en su entorno generando un buen desempeño, sin duda las habilidades blandas son definitorias para poder ocupar un empleo, para escalar en el ranking laboral, liderar tu propia empresa, desempeñar un cargo público, mejora de la integración en la comunidad, fortalecer el tejido social entre otros.
La habilidades blandas poco a poco han ganado terreno y actualmente muchos programas educativos en el mundo impulsan cada vez más el desarrollo y fortalecimiento de habilidades blandas en sus estudiantes, son llamadas las habilidades del siglo XXI ya que se enfocan al desarrollo socioemocional del individuo, algo determinante para detonar el éxito en todos los ámbitos.
Por ejemplo, dos personas que se han capacitado para lo mismo en estudios y han obtenido los mismos resultados académicos, pero quien sepa solucionar conflictos, ser empático y posea habilidades comunicativas, definitivamente será más exitoso.
La actitud ante la vida lo es todo, nos permite ver el mundo de una mejor manera, por eso la carencia de habilidades blandas suele afectar las relaciones personales y sociales, mientras que su existencia lleva implícita una actitud que hace que la belleza de una persona resalte ante otras, tener la disposición de conocerlas, practicarlas e incluirlas en la vida diaria abonará en gran medida en tu crecimiento profesional y personal y seguramente traerá un beneficio positivo como bienestar y felicidad.
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