A las 6 de la mañana del 21 de marzo, Guadalupe Piña y su familia salieron de Toluca rumbo al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles para vender 200 huaraches durante la inauguración, nunca se imaginaron que se volverían virales.
Con la venta de este alimento sustentan los gastos del hogar; sin embargo, las dificultades económicas los motiva a buscar nuevas opciones para mejorar sus ingresos, en esta ocasión fue el Aeropuerto.
“La idea fue de mi suegra, en la semana vio que iba a ser la inauguración y nos dijo vámonos a trabajar. Cuando fue la inauguración del aeropuerto de Toluca también fue y dice que le fue bien, por eso quiso hacerlo de nuevo”, compartió Guadalupe.
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Comienza el viaje
Tras madrugar y preparar los ingredientes, subieron a su auto rumbo a la carretera Toluca-México, pero a la altura de la Marquesa el coche se detuvo.
“Empezó a tronar y se paró, pensamos en regresarnos, pero no teníamos mucho dinero así que mejor decidimos continuar, lo dejamos en la Marquesa y esperamos a que pasara el camión que nos dejó en observatorio”.
En la terminal, dijo, tomaron un taxi que los llevó al aeropuerto por 350. Casi 5 horas después de salir de su casa llegaron a su destino, siendo de los primeros en pisar esta construcción.
Comentó que no tuvieron ningún inconveniente para ingresar hasta el estacionamiento donde los dejó el taxi, lugar vendieron todo su producto, “nos bajamos ahí porque fue donde vimos a la gente, caminamos hacia ellos hasta que un señor mayor nos pidió un huarache, detrás de él empezaron a formarse solitos”.
Todo parecía ir bien hasta que llegó la Guardia Nacional a pedirles que se movieran del lugar, pero gracias al apoyo de la gente lograron vender sus 200 huaraches en poco menos de 2 horas.
“Las personas nos defendieron, iban detrás de nosotros, al final nos gustó ir y nos ayudó porque no teníamos dinero, con la pandemia mi esposo no tenía trabajo y mis niñas están enfermas, entonces fue bueno”.
Del aeropuerto a los Pinos
Aunque tanta exposición llegó a causarle temor, consideró que ha sido para bien, tal es el caso que la invitaron a vender huaraches en el Mercado “El Solar de Cencalli” en el Centro Cultural Los Pinos en la Ciudad de México, este fin de semana.
Además, aseguró que autoridades municipales se acercaron a ella para ofrecerle un puesto en la Concha Acústica de Toluca, donde podrá ofrecer su producto cada lunes.
“Nos daría gusto que nos apoyen cuando esté vendiendo, también quisiéramos que hubiera un espacio en la Ciudad de México donde no nos quiten, donde podamos trabajar, lo único que queremos es trabajar”.
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Vida diaria
La entrevistada agregó que conoce esta receta desde hace 12 años, quien le enseñó fue su suegra, ella lo aprendió a los 15 años. Desde entonces salen cada fin de semana rumbo a la alameda de la Ciudad de México para ofrecerlos a 35 pesos.
Guadalupe divide su tiempo entre el negocio y los trabajos domésticos y, aunque siempre hay clientes, aclaró que los retos económicos siempre están a la orden del día, por lo que espera que esta exposición mediática le ayude a mejorar sus ventas.
Por Aura Moreno/La Jornada Estado de México
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