Familiares de Omar Reyes, joven originario de San Salvador, quien lleva casi mes y medio sin ser localizado en la frontera, denunciaron que la demanda levantada en el Ministerio Público de Actopan y la prueba de ADN que se le tomó a la mamá del joven, nunca fueron enviadas por la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) a la Fiscalía General de Chihuahua para dar seguimiento al caso.
En entrevista con la tía del joven, lamentó que además de no tener respuesta por parte de las autoridades hidalguenses en la búsqueda del joven de 20 años de edad, se sume la omisión y su ineficiencia.
“La denuncia que se presentó en el distrito judicial de Actopan el 16 de noviembre y no la enviaron a la Fiscalía de Chihuahua para llevar a cabo la búsqueda. La prueba de ADN de la madre, quien acudió a tomarse en Pachuca, se nos informó que esta extraviada”,
dijo la familiar.
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Quien señaló que la única respuesta que se tiene de la autoridad estatal es de una funcionaria de la Secretaría de Desarrollo Social estatal (Sedesoh), quien les envió un formato para requisitarlo y se contestó, pero no hay más acercamiento.
Mientas que la madre de Omar Reyes López se trasladó a Chihuahua para localizarlo desde que se le perdió la pista del joven en algún punto de Ojinaga, a la situación de la búsqueda se sumó la burocracia y a ineficiencia de las autoridades hidalguenses.
Hasta el momento la familia se ha apoyado en organizaciones civiles, una de estas incluso les ayudó a tramita el amparo indirecto 1913/2021, que permitió a la Fiscalía General de Chihuahua continuar la búsqueda por la frontera, pues el 10 de noviembre Omar Reyes, envió sus última ubicación en el desierto de Ojinaga.
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En medio de la búsqueda de Omar Reyes, la madre del joven se unió a un grupo de familiares de 15 migrantes que también buscaban cruzar a Estados Unidos, pero estos no secuestrados por un comando armado junto en la zona donde se perdió la pista del hidalguense.
Además, existe otro caso más de un hombre originario de Guanajuato con similar condición. Omar Reyes, salió de su hogar a finales de octubre con la esperanza de cruzar a Estados Unidos para encontrar trabajo y mejorar su condición económica.
El 10 de noviembre fue la última comunicación que registró con su familia, pues se encontraba perdido en el desierto de Ojinaga cercano ya a la frontera con Estados Unidos.
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