Escuela burbuja, la educación presencial a “escondiditas” en Pachuca

Mientras que en Hidalgo la educación pública y privada continúa a distancia para evitar contagios por Covid 19, en Pachuca la llamada escuela burbuja opera de manera presencial.

Cabe recordar que este tipo de lugares de enseñanza surgió en algunas entidades del país, durante el confinamiento, por padres y docentes que se organizaron para recrear el salón de clases y complementar el aprendizaje, con grupos reducidos de alumnos para evitar contagios de Covid 19.

Padres de familia consultados sobre esta alternativa escolar que no cuenta con el registro oficial de la Secretaría de Educación Pública (SEP), no solo permite a la niñez continuar con el aprendizaje sino socializar y prepararlos para la normalidad, ya que al menos en Hidalgo, el regreso a las aulas “no se ve para cuando”, comentaron.

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La escuela burbuja cobra 3 mil 250 pesos

Esta modalidad de estudios en la capital hidalguense, la cual se anuncia en varios grupos de Facebook, y añade en su publicidad “incorporados a la SEP”, cobra una cuota mensual de 3 mil 250 pesos, y su “oferta educativa” es desde preescolar hasta el cuarto año de primaria.

Así lo señaló la titular de una escuela burbuja en Pachuca, al dar información vía telefónica a una madre de familia, a quien envió de manera digital los requisitos de inscripción que deben mandarse de forma digital, y la hoja de inscripción con el logotipo Portal de Mosaicos.

La responsable explicó que la escuela burbuja sigue el programa educativo de la SEP, pero se vale de otra institución educativa para otorgar un certificado.

“Yo me asocié con otra escuela en Chiapas, y esa escuela me incorporó a todos mis niños, esa escuela al final del ciclo escolar proporcionará la boleta del año que están cursando”.

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“Hasta ahorita no hemos tenido ningún contagio, en preescolar lo estamos cerrando a diez niños, porque el salón es pequeño. Tenemos un grupo dividido donde está primero y segundo de primaria con cinco niños, en tercero y cuarto de primaria tenemos ocho”,

detalló la encargada.

No trabajan como clandestinos

“Nosotros no estamos trabajando como clandestinos”, asegura la responsable, “lo que pasa es que aquí las personas están de manera voluntaria, los papás firman una responsiva de que están de acuerdo sus hijos estén aquí. Si llegan a decirnos algo, nosotros estamos trabajando  como si fueran clases particulares”.

De esta manera es como se desarrolla la educación presencial en términos de socialización que según los especialistas, la infancia necesita para su formación, mientras las autoridades sanitarias y educativas resuelven el dilema si los menores deben regresar a las aulas o no a casi dos años del inicio de la pandemia.


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