El derecho al aborto en riesgo

Mientras usted está leyendo esta columna en el Congreso de Aguascalientes están por votar una iniciativa para limitar el derecho al aborto voluntario a la semana 6.

Hace 8 meses estábamos celebrando que gracias a una sentencia de la Corte y al trabajo de las organizaciones Morras Help Morras, Cultivando Género, TERFU, CECADEC y GIRE en el cual se obligó a este Congreso facho y antiderechos a respetar la Constitución y los derechos humanos de las personas con posibilidad de gestar y reconociera este derecho.

Claramente, para los panistas y otros diputades con otros colores de partido, pero con el alma antiderechos, está sentencia les puso en una situación incómoda y cumplieron a regañadientes, por temor a que les iniciarán algún proceso por incumplimiento de sentencia de la Corte.

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Desde que se publicó, el acceso a los servicios de aborto era casi nulo por negaciones de la Secretaria de Salud que al igual que su Gobernadora, están en contra del derecho a abortar.

Cuando la reforma pasó, la mayoría de la clase política de Aguascalientes dijeron que buscarían formas de volver a proteger la vida desde “la concepción” y eso sí lo cumplieron. El pasado 23 de agosto, a unas semanas de que este Congreso que fue sancionado por la Corte deje de estar en funciones, decidió presentar una iniciativa para volver a reformar el Código Penal. En ella no se propone este retroceso, sino también impone reglas muy severas para acceder al aborto por alteraciones genéticas, eliminar el aborto por riesgo a la salud o vida de la persona embarazada y que si una persona tiene un aborto espontáneo se hagan pruebas (que no existen, por cierto) para determinar que efectivamente fue accidental.

Esto que el Congreso hidrocálido pretende hacer es una violación al principio de progresividad y no regresividad de los derechos humanos, lo que significa que cuando hemos obtenido un derecho el estado no debería dar pasos atrás.

Sin embargo, los derechos humanos son un discurso y como tal, dependen de las élites para ser interpretados. En este caso el Congreso piensa que tiene razones suficientes para dar este retroceso y tienen los votos para hacerlo.

Mi preocupación radica en que, aunque actualmente el marco constitucional tiene herramientas para no dar este retroceso, el Poder Judicial Federal y la Corte se encuentran en un momento muy delicado y la actual reforma que se está discutiendo pone en peligro los avances que hemos tenido en materia de aborto.

Ahora que se plantea elegir a juzgadores sin rostro, que no vamos a saber quienes son y qué piensan, existe el enorme riesgo que en el Poder Judicial Federal y particularmente a la Corte lleguen personas antiderechos, que compartan las ideas de les legisladores hidrocálidos y validen está reforma. Está historia ya la hemos visto en otro país: Estados Unidos, que en 2022 su Corte antiderechos dió un reves a la sentencia de Roe vs Wade y que ha provocado que en varios Estados se prohíba totalmente el acceso al aborto o se límite a menos semanas.

Este límite es una carga para las personas con posibilidad de gestar porque enterarte de un embarazo en la semana 6 es casi imposible, además de que la recomendación para poder hacer procedimientos seguros, exitosos y menos costosos de aborto es después de la semana 6 que ya sucedió la implantación y el saco gestacional es visible.

Aguascalientes nos está dando una vista previa del panorama que se avecina con la reforma al Poder Judicial para los derechos reproductivos. Hoy más que nunca necesitamos defender nuestros derechos y acompañar a las colectivas y organizaciones locales que están viendo en disputa los derechos de las personas con posibilidad de gestar, no solo de su Estado, sino de todo el país.