Twitter: @arturohenkel
Apenas hablábamos de las repercusiones que ha tenido la guerra en el oriente de Europa en el deporte, pero no contábamos con que desafortunadamente ese mismo fin de semana nuestro país también sería noticia internacional a partir de la extrema violencia que se desató en medio de un partido de futbol entre fanáticos de Querétaro y Atlas en el Estadio ‘La Corregidora’ de la capital queretana.
En México se sabe de rivalidades entre aficiones como la del ‘Clásico Nacional’ entre Chivas y América, que también tiene el ‘Clásico Capitalino’ contra Pumas; en el ‘Clásico Regio’ entre Tigres y Rayados; incluso el ‘Clásico Tapatío’ entre Guadalajara y Atlas, pero pocos sabían que este encuentro tenía una rivalidad con antecedentes en los que ya se habían dado brotes de violencia entre seguidores rojinegros y de Gallos, generados a por la lucha por el no descenso.
Las dantescas imágenes en la cancha y la tribuna del escenario queretano le dieron la vuelta al mundo, dieron un saldo inicial de 26 heridos, 3 de ellos de gravedad a través de un reporte oficial de las autoridades estatales, sin embargo en redes sociales se ha manejado a través de perfiles personales y de páginas de algunos sectores de la ‘Fiel’ (como se denomina a la afición atlista), que existen casos de desaparecidos y que han sido ocultados pos intereses políticos. El deseo generalizado es que la información oficial sea cierta y no tengamos vidas que lamentar.
Sigue leyendo: Su MAMÁ lo entregó a la POLÍCIA por el caso QUERÉTARO
Sin duda este episodio de violencia en el futbol es uno de los más graves en nuestro país, donde en años y décadas anteriores se habían dado también hechos aislados de batallas campales entre porras e incluso contra elementos de seguridad pública, pero nunca con este grado de brutalidad.
Los que lo vivimos no podemos olvidar el caso de la Final de la 2ª División en la ‘Bella Airosa’, en la que luego de que Pachuca perdiera curiosamente ante Cobras de Querétaro se desbordó la violencia en el Estadio Revolución y sus inmediaciones, al grado de que el cuerpo de granaderos lanzara gas lacrimógeno y el auto del árbitro central del partido fuera incendiado, hace casi 36 años un 18 de mayo de 1986.
También recomendamos: Las desafortunadas consecuencias de la guerra en el deporte
Algunos medios y aficionados del futbol nacional señalan cierta responsabilidad de la actual violencia al equipo de la capital hidalguense, a raíz de que en 1996 surgiera el primer grupo de animación en México con influencia sudamericana: la Barra Ultratuza, pero lo cierto es que aquel incidente ocurrido 10 año antes, nunca ha vuelto a repetirse en la ‘Cuna del Futbol’; lo que sí ha sucedido en algunos otros estadios de nuestro país, y otros países como Inglaterra, Argentina y Turquía, entre otros.
Las sanciones legales para los responsables por parte de las autoridades competentes tendrán que ser con todo el peso de la ley, y las sanciones económicas y reglamentarias ya fueron emitidas por la Federación Mexicana de Futbol, tanto con el veto para ambas aficiones como para la directiva del Querétaro, así como las medidas a seguir.
Sin embargo, lo importante es que casos como estos nunca más se repitan ni es nuestro futbol ni en el planeta, y menos que la violencia esté justificada por un deporte tan bello como el futbol. Todos los que estamos involucrados: futbolistas, directivos, autoridades públicas, periodistas, pero lo más importante: los aficionados hagamos consciencia de que el #GritaXLaPaz no sea solo una campaña mediática, sino una forma de vivir el futbol y la vida. ¿No lo creen queridos lectores de ‘Epopeyas… de hidalgos, heroínas y otras gestas deportivas’?
Deja una respuesta