El Agua III

Expertos en el tema calculan que los consumidores de agua pagamos un tercio de lo que realmente cuesta llevar el agua hasta nuestras casas, oficinas o fábricas. Las tarifas de agua en México no reflejan el costo total de suministrar agua.

Pero antes recapitulemos. Tenemos en México un problema grave de agua, no es que lo vayamos a tener mañana, el problema ya lo tenemos hoy, cada que pasa el tiempo a cada mexicano le tocan menos litros de agua. La buena noticia es que esto tiene solución, la mala noticia es que los gobiernos no lo ven como una prioridad. La solución no pasa por consumir menos agua afectando nuestra calidad de vida o la producción de nuestras empresas, lo que necesitamos es vivir mejor y ser más productivos minimizando el consumo de agua. El agua es un satisfactor y llevar agua hasta nuestras casas y empresas tiene un costo que debemos cubrir ya sea con nuestro dinero o con dinero público.

Solucionar el problema del agua es complejo pero es más complejo tratar de hacerlo con pocos recursos, independientemente de las posibles soluciones, en todas se va a necesitar de dinero. Nunca está de más crear conciencia sobre el consumo del agua, cuidarla y no desperdiciarla, pero pensar que con eso basta es ingenuo, lo que necesitamos es inversión en infraestructura y tecnología, necesitamos pagar más por el agua o que se tome dinero de los impuestos para subsidiarla o una combinación de ambas.

Subir el precio que pagamos por el agua tiene al menos dos ventajas, la primera es que se generan recursos para inversión y la segunda es que a mayor precio del agua menor es la demanda, o si se quiere ver de otra forma, si el agua nos costara más la desperdiciaríamos menos. Tener un mal sistema de suministro de agua nos sale caro en muchos sentidos, uno es que 2.5 millones de viviendas en México no tienen acceso a agua potable entubada y 11.5 millones de viviendas no tienen agua todos los días, esto trae costos ocultos, por ejemplo, si quieres tener agua en tu casa todos los días tendrás que gastar en un tinaco o una cisterna. Un buen sistema de agua potable entubada tendría también efectos positivos en la salud, en México hay que ser muy valiente como para tomar agua de la llave, esta es una de las causas por la que en México se consume mucho refresco, si se pudiera lograr que el agua llegara a nuestras casas sin riesgo de enfermar al beberla, se consumiría menos refresco y en consecuencia la salud mejoraría. En México también se consume mucha agua embotellada, si pudiéramos beber agua de la llave sin riesgo, dejaríamos de gastar un dineral en agua embotellada. Así que en realidad ya pagamos más por el agua, pagamos por guardarla o acumularla y pagamos por no correr el riesgo de enfermar.

Así que las tarifas importan, tener un buen sistema de tarifas ayudaría a obtener más recursos, si se necesitan subsidios hay que focalizarlos bien para ayudar a los hogares que no tienen muchos recursos y no subsidiar al hogar o empresa que puede pagar o a los hogares que consumen mucha agua. Pagar más por algo no gusta y no es una medida muy popular pero todo parece indicar que en este caso no hay de otra. En el largo plazo hay que preocuparse por el cambio climático pero la solución de corto y mediano plazo pasa por hacerse de más recursos no sólo para llevar agua a las casas, también para reciclarla, estudiarla, investigarla e inventar nuevas tecnologías para conservarla o minimizar su uso sin afectar nuestra forma de vida.

Hoy alrededor del 40% del agua se desperdicia en fugas, 4 de cada 10 litros que se mandan a la red no llega a las casas o a las fábricas, tan sólo ese dato tendría que prender las alarmas en la oficinas gubernamentales pero parece que no. Sí, nosotros debemos cuidar más el agua, mucho podemos hacer desde nuestra conciencia, pero no nos engañemos, con eso no alcanza.