Economía feminista

Esta semana tuvimos la visita de la economista Kayla Kabeer en México, cuyo aporte principal a la economía feminista son sus estudios sobre desarrollo, pobreza, desde la perspectiva de género, viene precisamente para celebrar la reedición de su libro Realidades trastocadas  que se publicó hace 30 años, pero que sigue siendo vigente hasta nuestros días, en ese libro uno de los temas que aborda en su  investigación fue para saber ¿Qué pasaba con las mujeres que se le hacían transferencias monetarias directas para que salieran de la pobreza? De como incluso desde estas políticas de desarrollo el tema del género repite las inequidades, como ella misma menciona: “los hombres entran al proceso político como jefes de familia y agentes productivos, las mujeres son contempladas primordialmente por su capacidad como amas de casa, madres, y reproductoras por su cuenta y riesgo… por lo que han sido relegadas al sector más marginal del bienestar”, ya que precisamente estas transferencias no alcanzan a distinguir entre las necesidades prácticas (agua, luz, carreteras, etc.) con lo que son las necesidades estratégicas, ya que aunque logran resolver algunas cuestiones de la pobreza las mujeres que reciben estas transferencias siguen con un nivel de opresión, sobre temas como la reproducción, la violencia, etcétera.  

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En Equidad de Género, los estudios de Kabeer han sido una guía para el trabajo que realizamos en la Dirección de Políticas y Presupuestos para la Igualdad y el Desarrollo Sustentable, por eso fue de nuestro especial interés que pudieran tener un diálogo con las y los estudiantes de Economía , que permitieran entender que es importante cambiar las cuestiones estructurales que afectan a las mujeres, más allá de transferencias electrónicas y de cómo es necesario resolver esto desde otros escenarios posibles.  

Mi pecho no es bodega.  Es increíble que digan que no son lo mismo que antes, un discurso reiterativo y repetitivo del secretario de Gobierno, Guillermo “patán” Olivares, ya que ha permitido que, con tal de apoyar a candidatos o especialmente a su hermana en Tlaxcoapan, por parte de Bertha Miranda extitular del Instituto Hidalguense de las Mujeres, no sea llamada a cuentas por la mala administración que hizo, ya que la Auditoría Superior del Estado ha multado 3 veces al Instituto porque le hizo requerimientos de información que no cumplió cuando estuvo a cargo, por ello se han tenido problemas para cerrar la cuenta pública 2023 y no se ha presentado la cuenta pública 2024.  

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Mismo caso del presidente municipal Sergio Baños que sabiendo las irregularidades que había por parte de Adriana Flores en la Secretaría de las Mujeres de Pachuca, no resolvió lo necesario en ese lugar. 

Debido a esas situaciones se ha tenido que operar sin presupuesto, por lo que es muy grave que ambas quieran tener un lugar en el Senado, la primera como suplente de Simey y la segunda haciéndose llamar la “nueva política”, seguramente lo que pretenden es impunidad.