En el PRI siguen dando de qué hablar
Como si fuera una telenovela, el PRI Hidalgo está escribiendo una de sus historias más lamentables, pues se están pasando los estatutos por debajo del puente atirantado, violando los derechos partidistas de sus militantes.
Tan es así que la Sala Superior del TEPJF les tuvo que recomponer la plana, después de que los incondicionales de Carolina Viggiano impidieron que la planilla roja, conformada por cercanos a Omar Fayad, peleara por los lugares en el Consejo Nacional.
La Comisión de Justicia del PRI, omisa como en los buenos tiempos tricolores, ni peló la queja de sus militantes, por lo que el TEPJF le pidió que haga su chamba.
El partido que era el más vivo para la política no se da cuenta que para poder avanzar, tiene que limpiar el vaso desde adentro.
Mal y de malas
Que uno de los hidalguenses destacados de la política y que hoy se encuentra preso por el caso de Ayotzinapa, se encuentra enfermo de COVID, por lo que pasó la Navidad aislado.
Veremos cómo evoluciona en los próximos días, porque, aunque no está delicado, es mucho mejor pasar el año nuevo en un hospital del sistema de prisiones que en una fría celda.
Aunque el bote es el bote.
Parquímetros tranzas
La inundación que azotó a Tula el año pasado descompuso el funcionamiento de varias máquinas de los parquímetros, pero ese no es impedimento para que los policías locales metan infracciones a los conductores, a pesar de que no se puede pagar.
Resulta que los aparatos no reciben las monedas de las personas que estacionan sus vehículos, lo que les impide pagar su impuesto, pero los deja a merced de los uniformados que son buenos para morder y poner multas.
Está bien que tengan que recaudar, pero no abusando de esta forma.