Se roban la paz pachuqueña
Una de las malas costumbres que poco a poco se va instalando en Pachuca es el robo de monumentos. Ahora le tocó a la Paloma de la Paz que se encuentra (ahora se medio encuentra) en el Parque Hidalgo.
Estos delincuentes pueden llevarse objetos pesados sin que sean detectados por las autoridades, las mismas que se rompen las vestiduras cuando en las marchas feministas hacen pintas.
¿No que los monumentos son sagrados?
Ya empezó la repavimentación
Después de sexenios que mantenían olvidadas las calles y carreteras del estado, la SOPOTH por fin se comenzó a reparar el asfalto de diferentes calles como la avenida Revolución de Pachuca y la avenida principal a Boulevard Las Torres.
Parece que además de recursos, solo se necesitaba tener un poco de voluntad para ayudar a que los autos de los hidalguenses no sufrieran tanto. Esperemos que en unas semanas nos dejen de apodar “Bachuca”.
Otra de policías
Los que extendieron el festejo del maratón Guadalupe – Reyes fueron los policías de Tepeapulco, que siguieron festejando y manejaron borrachos golpeando autos y causando desfiguros en la vía pública.
Además de estar en estado inconveniente y uniformados, mostraron su pobre técnica de combate para agredir a los afectados afuera de una tienda, dejando el testimonio en un video de poco más de dos minutos.
Lo bueno es que la policía está para protegernos.
Hoy regresan a clases; lo bueno que aquí no hay metro.