El alcalde de Pachuca, Jorge Reyes Hernández, informó que ya fue resuelto el conflicto que derivó en el cierre temporal del relleno sanitario de El Huixmí, luego de que ejidatarios bloquearan el acceso este lunes por la mañana en protesta contra la empresa Conadia, encargada de la operación del sitio, por un adeudo de dos meses en el pago por el uso de suelo.
De acuerdo con el edil, tras entablar comunicación directa con el comisariado ejidal y representantes de la empresa, se logró llegar a un acuerdo y liberar el relleno desde la tarde del mismo lunes. Esto permitió reanudar el ingreso de camiones recolectores de residuos provenientes de Pachuca y Mineral de la Reforma, los cuales habían quedado varados por varias horas.
“Lo que aconteció ayer en el tiradero fue un cierre parcial por la falta de pago de Conadia. Ya hablé con el comisariado y con la empresa, y el tema quedó resuelto. Ayer mismo comenzaron a ingresar camiones para descargar. Quienes afirman que yo sabía del adeudo desde hace meses, mienten. Siempre he pedido a los ejidatarios que me informen cualquier atraso para evitar afectaciones”, subrayó Reyes Hernández.
Además, el presidente municipal adelantó que se realizará un diálogo con la empresa para evitar futuros retrasos en los pagos, ya que, aunque no depende directamente del municipio, sí impacta en la operatividad del servicio de recolección.
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Avance en nuevas celdas emergentes
Así mismo, el alcalde informó sobre el avance en la habilitación de dos nuevas celdas emergentes en la zona del relleno sanitario, las cuales serán operadas por las empresas Marsacot y Conadia, respectivamente.
“Hace rato les comenté: es un relleno, efectivamente, porque está en la misma zona. Son dos celdas diferentes, una de Marsacot y otra de Conadia. Ya están aprobadas para su construcción. La celda de Marsacot ya tiene prácticamente la liberación y puede comenzar a recibir residuos; la de Conadia tiene menos avance, pero está en proceso y también estará lista próximamente”, explicó.
Estas nuevas celdas permitirán sustituir el plan original de establecer un patio de transferencia, el cual ya no sería necesario debido a la disponibilidad de estas nuevas infraestructuras.
“Lo que tengo entendido es que estas celdas nos permitirán operar al menos un año. Con eso evitamos el uso del patio de transferencia, que era solo una medida temporal. Además, estamos trabajando en el Plan Municipal de Desarrollo Urbano (PMDU) para ampliar el relleno actual o establecer uno nuevo en la misma zona de El Huixmí, con una durabilidad proyectada de entre cinco y diez años”, señaló el edil.
Cuando se le preguntó específicamente por el avance físico de las celdas, el alcalde agregó:
“La celda de Marsacot ya está concluida, ya tenemos el oficio que autoriza su uso, está al 100%. La de Conadia aún no, habría que preguntarle a Semarnath estatal, pero ya está en proceso. Prácticamente con estas dos celdas cubrimos los dos años restantes de la administración”.
El contrato actual con la empresa Marsacot vence en diciembre, y aunque aún no se ha decidido si será renovado, Reyes Hernández destacó el buen desempeño de la empresa.
“Han cumplido incluso más allá del contrato, con más unidades, personal, uniformes nuevos y visión. La decisión final se cabildeará, pero han dado buenos resultados”, afirmó.
Premio internacional y nuevo enfoque ambiental
El alcalde también anunció que, en vez del patio de transferencia, buscarán participar en el premio internacional “Escoba de Oro”, que reconoce a ciudades por sus buenas prácticas en el manejo de residuos sólidos. Para ello, Marsacot incluirá tecnologías y proyectos sustentables como parte de su contrato.
“La idea es presentar este nuevo proyecto como parte de la política ambiental de la ciudad. Con este cambio, el plus que se había contemplado en el contrato el patio de transferencia se transforma en acciones que nos ayuden a competir por este galardón internacional”, dijo Reyes.
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