El proceso de entrega recepción de los gobiernos municipales, arrojó 23 nuevos casos de irregularidades y corrupción a la Auditoria Superior del Estado de Hidalgo (ASEH) que van desde obras mal realizadas hasta fallas administrativas que tendrán que ser incluidas en la revisión de la Cuenta Pública 2024, por iniciar y que se dará a conocer el próximo año a la Comisión de Vigilancia de la 66 Legislatura al Congreso local.
La gravedad de cada caso está sujeta a la opinión técnica del organismo fiscalizador y de la Secretaría de la Contraloría, esto no salva, primero que ex presidentas y ex presidentes municipales de responder a las observaciones y de no hacerlo enfrentarán procesos administrativos y penales, por lo pronto es una incógnita la magnitud de las irregularidades denunciadas por las nuevas administraciones.
No se pueden descartar venganzas políticas, pero 23 administraciones municipales: Tlahuiltepa, Huichapan, Epazoyucan, Zempoala, Metztitlán, Zimapán, Tepehuacán, Cuautepec de Hinojosa, Zapotlán, Cardonal, Almoloya, Xochicoatlán, Huehuetla, Ajacuba, Singuilucan, Pisaflores, Santiago Tulantepec, Actopan, Atotonilco de Tula, San Bartolo Tutotepec, Chapulhuacán, Zacualtipán de Ángeles y Molango.
Este proceso debe poner en alerta a las nuevas administraciones municipales para capacitar funcionarios y sobre todo que estos cumplan los perfiles para en principio evitar que por fallas en los procesos caigan en irregularidades, pero sobre todo que cumplan con la transparencia y la rendición de cuentas, para no incurrir en actos de corrupción que en la anterior administración lesionaron gravemente la confianza ciudadana. Por ahora tienen el más duro ejemplo de que un grupo de ex presidentes municipales están en prisión enfrentando procesos penales por la Estafa Siniestra y otros por diferentes casos de corrupción, de los que urgen sean sentenciados y sean declarados por jueces culpables o inocentes, para darle también resultados a la ciudadanía.