Apoyos de precandidatos

Un tanto diferentes, dos diputados federales son cercanos de los precandidatos a la gubernatura de Hidalgo: Navor Alberto Rojas Mancera, y Marco Antonio Mendoza Bustamante. 

Al primero lo conozco hace años. Es suplente del senador Julio Menchaca  y cercano a ocupar su sitio en la cámara alta. 

Nació el 12 de junio de 1963, y egresó de la UNAM como licenciado en Ciencias Políticas y Administración Pública, además de otras especialidades. 

Sus actividades políticas se han reflejado en Hidalgo. Fue secretario municipal en Tulancingo -2006-2009-. Después acometió otras responsabilidades, las dos últimas, regidor en Pachuca y legislador federal. 

Se distinguió por intervenciones como postulante de necesarios cambios en los ámbitos que le tocó representar. 

A eso, se suma ser padre ejemplar y conversador más que ameno. 

Mendoza Bustamante, fue designado por Carolina Viggiano coordinador de su campaña. Tiene tras de sí  aportes como escritor. 

Sus libros, Por siempre Tollantzinco, que presentó en el Palacio de Bellas Artes, Carranza el hombre tras la Constitución de 1917, y De la Peste Negra al Coronavirus. 

En una primera conversación, resultó que su tío, Marco Aurelio Mendoza, fue dirigente de locutores en Puebla y destacado maestro de quien escribe. 

Marco Antonio nació el 15 de enero de 1986, es Licenciado en Derecho, en Periodismo y en Locución. 

La soledad de Rita 

Es posible que muchos no recuerden a la actriz Rita Macedo, pero otros menos  no olvidan sus felices intervenciones como actriz de cine, teatro y televisión, además de modista. 

Es figura central de Mujer en papel, sustentado en sus memorias recopiladas y editadas por su hija, Cecilia Fuentes. 

En 2020 el libro fue considerado el mejor de no ficción y el mejor del año. 

María de la Concepción Macedo, nació en la Ciudad de México el 21 de abril de 1925. 

Se casó tres veces. La primera en 1943 con el productor Luis de Llano Palmer. Tuvieron dos hijos, la cantante Julissa y el también productor de televisión, Luis de Llano. Se divorciaron. 

El segundo enlace, un tanto fugaz, con Pablo Palomino. Finalmente, su tercer matrimonio con el reconocido escritor Carlos Fuentes. Procrearon una hija, Cecilia. 

Macedo decidió divorciarse, presuntamente por infidelidades de su cónyuge. 

Paulatinamente en sus últimos años entró en un cuadro depresivo. Se entiende así cuando escribió: 

“Pero el vacío que deja la ausencia de un compañero con quien compartir las impresiones que nos deja un libro, sentarte sola ante la mesa, ver un programa de televisión sin poder hacer un comentario, son esas cosas las que duelen y sé que dolerán siempre. 

“Comprendo que la culpa es mía, pero no alivia ni llena ese hueco constante”. 

Su hija retoma: 

“Esas fueron las últimas palabras que escribió mamá. A la mañana siguiente, el 6 de diciembre de 1993, visitó a Luis –su hijo- en las oficinas de Televisa y le dijo que estaba ahí para despedirse. Luego regresó a casa.  

“Como en diversas ocasiones había mencionado que se pegaría un tiro, le había dicho que no lo hiciera dentro de la casa pues yo tendría que seguir viviendo ahí.  

“Así que ella, muy obediente, tomó una pistola que no se bien de dónde sacó, se dirigió a su automóvil estacionado afuera de la casa y se disparó.  Un primer tiro no fue suficiente. Tuvo que encontrar fuerzas no sé de dónde, para apretar el gatillo de nuevo. Esta vez, logró su cometido”. 

Fue el fin de una estrella, colmada por sus decepciones. 


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