A un año, sigamos haciendo historia

El 5 es junio del año 2022 es una fecha sumamente importante para la historia de la incipiente democracia del estado de Hidalgo. Aquel domingo será recordado por mucho tiempo como el día en que de manera decidida, cientos de miles de hidalguenses salimos a las urnas para ponerle fin a un régimen que estaba por cumplir 100 años al frente de uno de los estados más empobrecidos del país.

La esperanza fue depositada en las urnas y le dieron el mandato popular a Julio Menchaca Salazar para encabezar la transformación de la vida pública de nuestra entidad y así dar inicio a una nueva forma de gobernar, de manera honesta, transparente y cercana al Pueblo.

Las viejas luchas nos han traído hasta aquí, después de décadas de un largo andar en las pugnas políticas y sociales por la democratización de Hidalgo; ante la oportunidad histórica de cambiar la realidad de nuestro estado, lo cual no es una tarea para nada fácil, sobre todo si tomamos en cuenta todos los años de saqueo, de olvido, de represión y de corrupción que nos dejó el PRI- Gobierno y su rancia hegemonía que contaminó todos los sectores públicos, sociales y culturales.

Hoy es el momento en que la izquierda debe dejar la resistencia de las luchas políticas históricas y ahora, desde el ejercicio del poder –y todas las contradicciones que conlleva–, redefinir los

conceptos y comenzar a construir nuevas realidades en beneficio de las y los hidalguenses; abajo,

en medio y arriba, no solo en los aparatos del propio estado; sino de lo social, lo político, lo cultural y lo económico, con sus claras y naturales resistencias.

Ahora, si bien la izquierda responde a momentos muy concretos de nuestra historia, de contextos sociales y culturales muy específicos, no podemos abandonar la discusión política que nos define, de manera inteligente y reflexiva para explicar, ¿que somos y hacia donde vamos?, respuesta que necesitamos para poder combatir la propia interiorización del neoliberalismo en nuestra práctica política.

A 1 año de la victoria por la vía pacífica, seguimos convencidos que los principios de ‘no mentir, no robar y no traicionar al pueblo’ convertidos en acciones de políticas públicas, al servicio del

colectivo y de los sectores más vulnerados, nos llevará a buen puerto.

Tengo plena confianza en que la transformación que inició el presidente Andrés Manuel López Obrador y que en Hidalgo está consolidando el gobernador Julio Menchaca Salazar va a construir un estado más próspero y con mayores oportunidades para todas y todos.

Sigamos en las comunidades, en los barrios y en las colonias, trabajando e impulsando arduamente una nueva forma de hacer vida pública, con alegría y sin perder la esperanza.

Entre todas y todos, seguimos haciendo historia.

Por Dino Madrid