Tras el discurso de unidad invocado el pasado sábado por el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, deslizó la posibilidad de que la opinión del gobernador Omar Fayad sea vital en la designación del próximo candidato(a) al gobierno de Hidalgo, un mensaje que la militancia y los propios medios de comunicación interpretaron a su manera.
Aunque algunos atribuyen el posicionamiento de Alito Moreno a una forma de curarse en salud para anticipar que no meterá la mano en la designación de candidato en Hidalgo y evitar un choque con el gobernador Omar Fayad, también alimentó todo tipo de conjeturas e interpretaciones, la mayoría en el sentido de que la decisión ya estaría tomada y la sesión del Consejo Político Estatal celebrado el pasado sábado en la sede hidalguense, fue el escenario perfecto para enviar las primeras señales.
Sin embargo, pareciera que el discurso de Alito polarizó aún más la disputa interna de cara al 2022, donde los principales punteros siguen siendo la secretaria general del PRI, Carolina Viggiano Austria y el presidente municipal de Mineral de la Reforma, Israel Félix Soto.
A ambos aspirantes, se suman el dirigente estatal del PRI, Julio Valera Piedras; la diputada federal Sayonara Vargas Rodríguez y la diputada local priista, María Luisa Pérez Perusquía, quien fue la primera en destaparse para este proceso.
Por ello, el mensaje de Alejandro Moreno parece tener otro fondo, pues lo que menos necesita en estos momentos su partido es patear el avispero en Hidalgo y que se le acuse de una abierta intromisión para favorecer a alguno de los aspirantes, convirtiéndolo en juez y parte.
Para nadie es un secreto que los afectos y la simpatía de Alito Moreno están con Carolina Viggiano, y que ella es la carta del PRI nacional para jugar en Hidalgo.
“Competitividad y rentabilidad”, son las características que deberá tener el candidato o candidata del PRI a la gubernatura de Hidalgo, exigió Alito.
Del otro lado, el presidente municipal de Mineral de la Reforma, Israel Félix Soto, cuenta con todo el respaldo de un equipo consolidado al amparo de la estructura gubernamental que aún dirige el mandatario Omar Fayad Meneses, quien ha visto en el alcalde mineralense, el perfil adecuado para continuar con su legado político.
Moreno se mostró prudente en su discurso, incluso hasta complaciente, pues a estas alturas sería innecesario y hasta imprudente un choque con Fayad.
La moneda sigue en el aire y por ello, tampoco descartemos que el líder nacional priista soltara con toda intención un buscapies político para medir la reacción y el ánimo de su militancia en Hidalgo de cara al 2022.
@AlexGalvezQ
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