La llamada elección más grande de la historia llegó a su cuarta semana, pero hasta ahora, los candidatos y sus propuestas han sido opacados por los escándalos internos de los partidos, las traiciones y las coaliciones que no terminan de cuajar ante la simulación y reticencia de los propios militantes, que ven a sus abanderados adormilados todavía sin entrar en el ánimo de los votantes.
Para muestra de lo que le digo varios botones:
La disputa interna que cada vez se hace más evidente en el PRI, donde su dirigencia nacional camina para un lado y la estatal para el otro; crisis que se ha agudizado por las pretensiones de la secretaria general del CEN, Carolina Viggiano Austria, que sigue perfilada como una de las aspirantes más fuertes al Gobierno de Hidalgo, lo cual no es bien visto por los grupos locales de poder.
El llamado que hizo el excandidato de la alianza Juntos Haremos Historia a la presidencia municipal de Pachuca, Pablo Vargas González, para no votar por los candidatos a diputados de Morena, al acusar que en Hidalgo persiste esa tenebrosa alianza entre la cúpula de su partido y el Grupo Universidad para apuntalar “a la mafia del poder”.
La postura del catedrático -quien perdió la elección municipal- ha abierto tremenda fisura en el morenismo capitalino, que se suma a la crisis de credibilidad que enfrentan a nivel nacional ante la imposición y reparto de candidaturas a personas non gratas, que son todo, menos morenistas.
Cuando se pensó que Morena no podía caer tan bajo, salió a defender con uñas y dientes a un personaje acusado de violación que se aferra a la candidatura al gobierno de Guerrero. Mientras que en Hidalgo se aventó la puntada de registrar a Francisco Xavier Berganza Escorza en la posición uno de su lista de candidatos a diputados plurinominales, espacio reservado para una persona con discapacidad, pero que fiel a su falta de escrúpulos, el cantante apoyado por la cúpula morenista intentó agandallarse.
Mientras que la senadora Xóchitl Gálvez Ruiz fue captada levantándoles la mano y resaltando las bondades de los candidatos a diputados del PRI en los distritos de Pachuca, Juan de Dios Pontigo Loyola y Citlali Jaramillo, partido que la ve como un riesgo rumbo a la sucesión del 2022 en Hidalgo, luego de que la panista se destapó, aunque otros creen que buscará la jefatura del Gobierno de la CDMX.
En esta lista no podía faltar Cuauhtémoc Ochoa Fernández, exsubsecretario de Fomento y Normatividad Ambiental en el sexenio de Enrique Peña Nieto, y quien de acuerdo a La Jornada Hidalgo estuvo involucrado en el caso Fertinal al participar en la sesión del Consejo Administrativo de Pemex donde se aprobó el proyecto para dicha compra, uno de los casos emblemas de la corrupción peñista que ha sido exhibido por el presidente Andrés López Obrador.
Ahora, el llamado niño Verde de Hidalgo es aliado de Morena para buscar la diputación federal por el distrito V de Tula de Allende, traicionando incluso a aquellos a quienes ayer le abrieron la puerta de Los Pinos.
Y fue precisamente el Partido Verde que salió al rescate de Canek Vázquez Góngora, cuyo efímero paso por Morena no le fue tan prodigioso, tan es así, que ahora es candidato a diputado plurinominal por el partido del Tucán, espacio que le fue negado en Morena, quien también lo bajó de la contienda para buscar la candidatura a la presidencia municipal de Pachuca, bastión que recuperó el PRI.
@AlexGalvezQ
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