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Si bien el deporte es ya en sí mismo una práctica que genera gran satisfacción por el solo hecho de realizarla en cualesquiera de sus disciplinas, también es cierto que los máximos exponentes siempre han sido objeto de reconocimiento a lo largo y ancho del mundo, entre sus seguidores e incluso sus detractores, pero finalmente al llegar a la profesionalización, como en toda labor, las percepciones económicas se vuelven un aliciente, al grado que incluso, al mejorar el rendimiento personal estrictamente en el deporte, más allá de los contratos o premios conseguidos, el encumbramiento de los atletas en auténticos ídolos, héroes inalcanzables de las multitudes provoca que los patrocinadores inviertan grandes cantidades en que ellos sean la imagen de su marca.
Ejemplos a lo largo de las décadas en las que el deporte ha puesto en el grado de semidioses a los deportistas dándoles contratos multimillonarios y en los que la mercadotecnia se ha encargado de maximizar este fenómeno al llevar sus historias de vida como un modelo aspiracional podemos encontrar muchos, y a otros muchos esta senda tal vez los haya encontrado ya muy tarde, como a los dos considerados más grandes del futbol: Pelé y Maradona, que gozaron de este impacto de los obscenos contratos que paulatinamente alcanzaron las 7, 8 y hasta 9 cifras, solamente en la recta final de sus carreras o cuando ya de su grandeza solo quedaba la fama.
Pero sin duda el deportista a nivel global que vino a revolucionar la industria deportiva en este sentido fue en el baloncesto profesional de los Estados Unidos: Michael Jordan, quien más allá de alcanzar contratos millonarios con los Toros de Chicago, a la par de otras figuras de la NBA, su impacto mediático se dio a partir del acuerdo con la marca deportiva Nike, que catapultó tanto la carrera del basquetbolista como a la firma. Sin duda, este fue el punto de inflexión en la mercadotecnia deportiva; a partir de ahí infinidad de marcas y atletas encontraron en esta fórmula un éxito económico, que normalmente siempre va de la mano del rendimiento deportivo.
En el ‘Top Ten’ de los mejor pagados del 2021 hay una lista dominada por jugadores que sobresalen en la práctica de deportes de conjunto, pero también a atletas líderes de deportes individuales: el tenista suizo Roger Federer encabeza la lista con $106.3 MDD; inmediatamente debajo otros dos veteranos que han dominado el futbol durante los últimos 15 años: Cristiano Ronaldo ($105 MDD) y Lionel Messi ($104 MDD); el futbolista brasileño Neymar con $ 99.5 MDD; continúan la lista 3 basquetbolistas: LeBron James ($ 88.2 MDD), Stephen Curry (74.4 MDD) y Kevin Durant ($ 63.9 MDD); debajo con $62.3 MDD el más grande del golf: Tiger Woods; la lista la cierran los jugadores mejor pagados de la NFL: los mariscales de campo: Kirk Cousins de los Vikingos de Minnesota ($ 60.5 MDD) y Carson Wentz de los Potros de Indianapolis ($ 59.1 MDD).
Es de llamar la atención que en esta lista no se encuentre el piloto heptacampeón de Fórmula 1, Lewis Hamilton, quien en la actual temporada consiguió un contrato con Mercedes de $43 MDD, pero se desconoce su cifra exacta por patrocinios. Tampoco podemos dejar a los beisbolistas de las Ligas Mayores, que incluso llegan a cantidades de 9 cifras, con la particularidad de que son contratos multianuales, para este año el mejor pagado es Mike Trout que pactó un contrato de $426.5 MDD por 12 años con los Angelinos de Los Ángeles.
Entre los deportistas mexicanos, es el púgil Saúl ‘Canelo’ Álvarez el que mayores ingresos genera, incluso había conseguido un contrato de $365 MDD por 11 peleas con Golden Boy Promotions, contrato que quedó sin efecto por inactividad en la pandemia, pero se calcula que en el 2020 tuvo un ingreso entre $55 y 70 MDD, muy por encima de ‘Checo’ Pérez que para este año logró un contrato por $8 MDD con la escudería Red Bull, y los futbolistas Raúl Jiménez (Wolverhampton de la Premier League) con $8.3 MDD e Hirving Lozano (Napoli de la Serie A Italiana) con $6.2 MDD, sin embargo, se espera que el ‘Chucky’ al término del presente año futbolístico consiga un mucho mejor contrato, luego de ser tazado por su equipo en $80 MDD de cara al mercado de verano.
Sin embargo, los dos futbolistas que actualmente están en los reflectores son dos jóvenes de 22 y 20 años respectivamente: Kylian Mbappé del Paris Saint Germain francés y Erling Haaland del Borussia Dortmund alemán, equipos que pretenden obtener entre $200 y $250 MDD por su venta a dos de los más grandes clubes: el Real Madrid y el Barcelona, que con estos fichajes buscan regresar a los primeros planos que tuvieron de la mano de Cristiano Ronaldo y Lionel Messi, que los mantuvo en dominio del balompié mundial en el presente siglo.
Queridos lectores de ‘Epopeyas… de hidalgos, heroínas y otras gestas deportivas’, ¿qué deportistas piensan que están sobrevalorados o infravalorados en el deporte a nivel nacional e internacional?
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