En los barrios de Pachuca se hizo caso omiso a la recomendación de no celebrar la pasión y muerte de Cristo y en dos de los tres eventos más importantes hubo representaciones con público, aunque con menos gente de la habitual del Viernes Santo.
En el barrio de El Arbolito por la mañana se celebró la escenificación del camino de Jesús al Gólgota, ante la presencia de un regular número de vecinos quienes acompañaron a los actores que dieron vida al tradicional viacrucis del populoso barrio pachuqueño.
Durante la representación los actores que personificaron la pasión no se les veía puesto cubre bocas, y entre los presentes era disímbola la utilización de las medidas sanitarias.
En la representación número 52 del viacrucis en El Arbolito, quién tomó la palabra reconoció las dificultades que han tenido debido a la pandemia, aunque de manera temeraria consideró que el virus está acabado.
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Recordó en esta conmemoración, que Jesús ama a cada uno de nosotros y con mucha humildad, mucha sencillez y mucha fe entregaban este Viacrucis al Padre Celestial.
Debido a la pandemia, la representación fue mucho más corta y se hizo el juicio en calles más arriba donde hubo menos personas.
En Cubitos sucedió algo muy similar, debido a que la representación se llevó a cabo con algunas personas presentes, aunque con poca gente.
No obstante el recorrido fue el mismo para la crucifixión de quién encarnó este año a Jesús de Nazareth.
Este año los organizadores decidieron llevar el Viacrucis de Cubitos a los fieles a través de las redes sociales, ya que se transmitió en vivo para que los creyentes pudieran atestiguar esta representación que a este año llegó a su 50 aniversario.
En el caso del Barrio Las Lajas, la escenificación fue muy particular este año, ya que en este tradicional viacrucis sí se tomaron las medidas sanitarias por parte de los organizadores y de las personas que intervinieron para conmemorar la pasión y muerte de Jesús.
En esta ocasión no se observó que se colocarán la indumentaria como los uniformes de los soldados romanos ni las mujeres que acompañaban a Jesús sus túnicas ni tampoco el propio vecino que da vida Jesús se vistió como él.
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En Las Lajas hubo una conmemoración muy sencilla, muy sobria y también muy responsable, pues los que intervinieron llevaban puesto su cubrebocas incluido quién interpreta a Jesús, además de que no había público en Las Lajas, únicamente estaban los organizadores.
La escenificación en Las Lajas también se transmitió en vivo a través de las redes sociales de este viacrucis en Facebook, donde se pudo apreciar que quién encarnó a Jesús de Nazaret hizo el tradicional y agotador recorrido que sale de Las Lajas y termina en el Cerro del Lobo.
En Las Lajas únicamente un pequeño círculo del comité organizador estuvo presente para recordar el sacrificio que Cristo hizo en la cruz para el perdón de todos nuestros pecados en Pachuca.
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