Uno de los requisitos legales que tienen los partidos políticos para participar en un proceso político electoral, es el presentar una “Plataforma Electoral”, donde se exponen las propuestas con las que el partido quiere afrontar una problemática que aqueja a la población en general.
En 2020, la mayoría de los partidos políticos presentaron una plataforma para renovar alcaldes en la entidad, en la que se destacó por ser poco inclusiva y limitada en temas de movilidad; esta agenda que impacta en su totalidad en el día a día de las personas por el desplazamiento de bienes y servicios, los partidos políticos no le han querido dar la importancia que se requiere y su ausencia se ve reflejada en las agendas locales, donde se sigue favoreciendo el uso del automóvil, poca o nula infraestructura hacia las políticas de movilidad sustentable, que hoy en día son vitales a causas de la pandemia y necesarias para construir calles justas y equitativas.
No es de sorprender que, para los siguientes comicios en el que se renuevan diputaciones federales y locales, los partidos políticos repitan la misma formula, la misma agenda y los mismos actores, que convierten las elecciones en un hartazgo ciudadano, donde se ha visto en los últimos años, que quien gana no siempre es el que tiene las mejores propuestas.
La agenda de movilidad y seguridad vial, es un tema que está en discusión en la escena pública nacional y que los partidos políticos deben abordar con el profesionalismo y la seriedad que se requiere, generando adeptos y confianza entre una población que necesita mejorar sus hábitos de desplazamiento de forma segura y sustentable.
La importancia de conocer las plataformas electorales antes de emitir el voto, nos permite estar mejor informados respecto a la agenda que quieren impulsar los partidos en los próximos años, pero también nos permite incidir, participar e involucrarse en la toma de decisiones de las políticas de movilidad que requerimos para transformar nuestros entornos urbanos y rurales, que nos permita mejorar el desarrollo económico, la competitividad y calidad de vida de nuestras ciudades.
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