El presidente ruso, Vladimir Putin, ha confirmado que no asistirá a la toma de protesta de Claudia Sheinbaum como presidenta de México, que se llevará a cabo el próximo 1 de octubre de 2024. Esta decisión ha generado diversas reacciones tanto a nivel nacional como internacional.
Una de las principales razones detrás de la ausencia de Putin es la orden de arresto emitida por la Corte Penal Internacional (CPI) en marzo de 2023, acusándolo de la deportación ilegal de cientos de niños ucranianos.
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México, al ser un país que ha firmado el Estatuto de Roma, está obligado a cumplir con las órdenes de la CPI, lo que pone en riesgo la libertad del mandatario ruso si decide asistir al evento.
En lugar de Putin, Rusia enviará a un emisario para representar al país en la ceremonia. Esta decisión ha sido vista como una medida diplomática para evitar conflictos legales y políticos durante el evento, ya que también evitará encontrarse con la primera dama de Estados Unidos, Jill Biden, quien ha confirmado su asistencia a la toma de protesta, lo que subraya la importancia del evento en el ámbito internacional.
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