El maestro esculpe al alumno

La analogía de que el maestro esculpe al alumno, como pensaba Miguel Ángel, nace de la idea de dar forma, de quitar el excedente para que solo quede la esencia. Y justo así, la aportación del docente va mucho más allá del conocimiento, es un motor que transforma vidas.

Detrás de esta reflexión es inagotable lo prodigioso que decir de un docente, sin duda es una de las personas más influyentes después de casa, pues contribuye a moldear la personalidad de los estudiantes, el líder, es mediador, es una figura insustituible en la estructura social, formador de ciudadanos y un auténtico promotor del futuro.

Resulta apasionante abordar el tema del maestro por múltiples razones, si consideramos que la educación es uno de los pilares que sostiene al país, el docente se coloca en un lugar de definición, por esto es que, ser docente no es para todos, no basta con saber, se requiere vocación, capacidad de servicio y un enorme corazón, pues son verdaderos agentes de cambio social.

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Estoy segura que muchos de nosotros recordamos a un maestro o maestra que nos cambió la vida, que nos impulsó a ser mejores, a vencer obstáculos y a creer que los sueños se pueden hacer realidad; desafortunadamente habrá quien haya experimentado lo contrario, entonces no era un maestro, simplemente era una persona falta de responsabilidad que se atrevía a presentarse frente a grupo.

En definitiva, ser maestro o maestra es una tarea demandante ya sea por formación o por vocación, de la mano del dominio disciplinar va la responsabilidad, el compromiso, y ese sexto sentido para mirar de cerca cuando se trata de enseñar, son muchos los factores emocionales que intervienen al momento de estar frente a grupo, no basta con ser bueno en su materia.

Ser docente es uno de los trabajos más completos y complejos, los maestros comprometidos con la educación saben que los cambios en el mundo son imparables y han reconstruido su práctica educativa pese a todos los retos, el papel del profesor evoluciona aceleradamente, la presencia de la tecnología en el aula ha redefinido sus funciones y no se puede perder de vista que un profesor es aprendiz de por vida.

Los docentes contagian a su alumnado la ilusión por el saber, esparciendo entre sus alumnos la semilla de la curiosidad; el maestro es guía, su modo de ser inspira, cree de un modo incondicional en sus aprendices, comparte su amor por la comunidad a la que pertenecemos y convierte su aula en un verdadero espacio de reflexión, debate y descubrimiento.

A unos días de haber celebrado el Día del Maestro, felicidades a las y los docentes que, con su trabajo diario, contribuyen desde el aula a la prosperidad social.