Derecho de Réplica de Susy Ángeles Por Columna Punto Por Punto (II)

Repetir una calumnia no crea verdad

Se insiste en la calumnia como si de tantas veces repetirla ésta se convirtiera en realidad.

Las personas que me conocen y rodean saben de la buena fe con la que siempre me he conducido en lo general y, en lo particular, con las servidoras públicas a las que se hizo referencia con nombre y apellido en la columna Punto Por Punto, firmada por Leonardo Herrera. Por eso, vuelvo a sostener que el episodio inventado y luego narrado en dicho espacio es completamente falso.

El fantástico cuento de algo que nunca sucedió me llevó a reunirme con una de los supuestos testigos que se menciona y quien, de acuerdo con las mentiras narradas, me “enfrentó”. En sincera y amena charla hablamos de lo sorprendidas que estábamos de las mentiras vertidas en el texto “Del destierro a la Secretaría de Salud” y luego compartimos en nuestras redes sociales una imagen de ese momento.

Los intentos de difamación no tienen cabida cuando se ha combatido codo a codo frente a los abusos del poder en sus distintas formas. En cambio, también hago mías estas palabras: “quien siembra vientos, cosecha tempestades”.

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Agrego: las mentiras, al paso del tiempo, quedan desnudas en su miseria y, con ellas, la de quien las fabrica.

El oficio periodístico merece todos mis respetos. En la literatura politológica es considerado que dentro de un sistema democrático, el periodismo debe servir para cuestionar al poder, dar a la sociedad información objetiva y oportuna, contrastar puntos de vista, ideas, proyectos.

Sin embargo, la verdad también merece respeto. Por ejemplo, en la columna del 10 de abril se habla de una “renuncia que llevaba elaborada” para ser firmada y ahora en un nuevo texto se dice que se trató de una “carta de licencia”; ello, claro, tras admitirse que es necesario un “procedimiento legislativo” para la separación del cargo de un legislador.

Nada se dice de que en el Congreso existe un servicio de seguridad y filtros de ingreso, 30 diputados de diferentes bancadas y, en las oficinas de cada legislador, personal que trabaja de cerca con ellos, entre asesores y administrativos.

Concluyo haciendo del conocimiento a la directiva de este periódico que no existe registro o antecedente de intento de comunicación de parte del señor Herrera para fijar una postura respecto de lo que tenía previsto publicar, como sí ha sucedido en anteriores ocasiones para temas informativos.

Atenta y respetuosamente. SAAQ