El reciente accidente automovilístico protagonizado por el reconocido comediante El Costeño ha dejado al descubierto una serie de deficiencias en el sistema de salud de Calnali, Hidalgo. Sin embargo, lo más alarmante no fue la falta de recursos médicos, sino la negativa a brindar el traslado necesario para recibir atención especializada en Pachuca. ¿Por qué le negaron este traslado?
El incidente ocurrió en el tramo de la carretera estatal Atlapexco-Calnali, tras la participación de El Costeño en la fiesta patronal de Atlapexco. Una curva cerrada y un desafortunado derrape llevaron a la camioneta en la que viajaba a caer en un barranco de dos metros de profundidad. A pesar de los daños materiales, lo más valioso se mantuvo intacto: la vida de los ocupantes, aunque golpeados.
Lo que sorprendió a muchos fue la falta de respuesta por parte de las autoridades locales. Cuando se solicitó una ambulancia para trasladar a los heridos a Pachuca, la capital del estado, la respuesta fue desconcertante. Solo el presidente municipal Isaid Acosta tenía la autoridad para autorizar dicho traslado, según se les informó. Sin embargo, ni Acosta ni Joel Nochebuena, alcalde de Atlapexco, respondieron a la petición de ayuda.
Ante la falta de alternativas, el equipo de El Costeño tuvo que tomar cartas en el asunto y organizar el traslado por sus propios medios. Esta situación, más allá de la anécdota de un famoso, pone de manifiesto las carencias y la falta de coordinación en la atención de emergencias en algunas zonas del país.
Es imperativo que las autoridades locales revisen sus protocolos y aseguren que situaciones como estas no se repitan en el futuro. La salud y seguridad de todos los ciudadanos, sin importar su estatus social o profesional, deben ser una prioridad indiscutible.