Lograr un descanso real por dormir bien es importantísimo para la salud y el buen desarrollo de todas nuestras actividades, desde luego que la vida escolar está ligada a este concepto para lograr mejores resultados.
Ayer fue el Día mundial del sueño, y se presentaron interesantes datos, estadísticas y actividades relacionadas con el tema, es alarmante como la población en general presenta ascensos en los trastornos en el sueño, un descanso insuficiente puede alterar la calidad de vida.
Con el paso del tiempo, el sueño en las personas se va modificando, se duerme mucho más de bebé que en la vejez, la recomendación para un adulto es en promedio 8 horas y tampoco es adecuado dormir más de la cuenta pues existe evidencia científica de afectaciones por esta causa.
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En el aula es común percibir a estudiantes que llegan desganados, con fatiga evidente, irritables, dispersos, que bostezan y hasta se duermen porque llegan “maldormidos”, es indispensable concientizar en los centros educativos sobre los beneficios de lograr un descanso adecuado asociado al buen dormir.
El influjo del sueño en el aprendizaje es un tema mucho más amplio y con extenso aporte científico, el buen descanso asociado al sueño juega un papel elemental pues el sueño está estrechamente ligado a procesos cognitivos y funciones tan complejas como el aprendizaje, estudios revelan que la privación de éste, produce una desaceleración en la velocidad de comprensión, disminuye la atención, causa problemas en la consolidación de la memoria, se refleja en el estado de ánimo y comportamiento en el aula.
La experiencia personal me permite identificar que, muchos escolares reducen sus horas de sueño por dedicarlos a dispositivos electrónicos (especialmente el celular), algunos en el nivel superior por trabajo, por falta de supervisión de los padres, o simplemente por decisión propia les gusta desvelarse y esto les impacta negativamente en su rol de estudiantes.
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Durante la pandemia las alteraciones del sueño se dispararon y persisten, si la disfunción del sueño es recurrente, lo recomendable es acudir con un especialista; de manera general, algo que merece atención compartir con el estudiantado y que puede funcionar para fortalecer el sueño, es procurar una buena alimentación, activación física, gestionar los mismos horarios para dormir, así como desconectarse de aparatos electrónicos al menos una hora antes de ir a la cama.
“Equidad del sueño para la salud global” es el lema 2024 de esta celebración, recordemos que dormir es una necesidad biológica que permite restablecer las funciones físicas y psicológicas esenciales para tener un mejor rendimiento durante el día.
La sabiduría encerrada en las frases populares, se impone extraordinariamente por ejemplo, cuando citamos “necesito consultarlo con la almohada”, pues da cuenta de todo lo que representa tomar adecuadas decisiones y estar óptimo después de un buen sueño.