En el 2023, el municipio de Tula recaudó un 25 por ciento menos de lo que se tenía estimado, lo cual refleja un fracaso, porque sugiere que la gente de la demarcación tolteca no tiene confianza en sus representantes, y aun así, la asamblea municipal decidió incrementarse la dieta en un 30 por ciento.
Así lo acusó el regidor morenista, Ricardo Baptista González, quien, en sesión de cabildo, manifestó que, según el presupuesto de egresos, se tenía contemplado gastar 107 millones de pesos que deberían entrar a las arcas municipales a través de recursos propios.
Sin embargo, solo entraron 81 millones de pesos, que equivalen al 75 por ciento de la meta establecida.
Así se informó durante la trigésima segunda sesión extraordinaria de cabildo, la cual se convocó, entre otras cosas, para probar una segunda adecuación al presupuesto de egresos 2023.
Baptista González explicó que la adecuación se pretendía hacer fuera de tiempo, pues debió quedar el 31 de diciembre a más tardar.
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Durante el uso de la palabra, Ricardo Baptista señaló que la falta de recaudación de recursos propios es un reflejo del “fracaso” que ha representado la mayoría de los integrantes de la asamblea municipal, pues manifestó que la gente no se siente representada y no confían en la mayoría de regidores, regidoras y las síndicas.
Esto porque muchos de ellos eran comparsas del exalcalde Manuel “N”, quien actualmente se encuentra en prisión preventiva, acusado de dos delitos: uso ilícito de atribuciones y peculado, por un presunto desfalco de 62 millones de pesos, en detrimento de las arcas municipales.
Ante la falta de recaudación, Ricardo Baptista recriminó que eso imposibilitó invertir más recursos en seguridad, en servicios públicos y en obras. Además, no conforme con los pésimos resultados, la mayoría de la asamblea municipal todavía decidió aumentarse el 30 por ciento de la dieta para este 2024, lo cual le parece una vergüenza.
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La segunda adecuación presupuesta
La sesión de cabildo del miércoles 24 de enero fue convocada para aprobar el dictamen y una segunda adecuación presupuestal del ejercicio fiscal 2023, y aunque se aprobó el dictamen por unanimidad, a la hora de querer aprobar la adecuación presupuestal, seis regidores y regidoras votaron en contra.
Al no tener mayoría calificada, no se aprobó la adecuación presupuestal que quedaría en alrededor de 388 millones de pesos, lo curioso es que esta adecuación era menor al presupuesto que actualmente está vigente, que es de 410 millones de pesos, lo que seguramente generará observaciones de la Auditoría, afirmó Ricardo Baptista.
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