Tengo claro que la vida es aquello que ocurre entre un paso y el siguiente; pero, ¿qué pasa cuando olvidamos cada paso que damos por estar más concentrados en la meta?
Hace no mucho escuchaba al Profe. Gustavo Bautista, oriundo de la huasteca hidalguense, hablar sobre el proceso político que implica la Cuarta Transformación de la vida pública con tanto ahincó, que no pude evitar poner toda mi atención a lo que compartía con nosotros.
Planteaba con alegría y su particular semblante, algo sumamente interesante, algo que dejamos de lado al vernos inmersos en ciertas lógicas políticas, se refería a disfrutar del camino de la consolidación de la Cuarta Transformación, camino que está lleno de alegría, conciencia, bienestar y movilización popular, y es que los logros y alcances del gobierno que encabeza Andrés Manuel López Obrador en la huasteca hidalguense no son menores.
Esas palabras me hicieron reflexionar, darme cuenta de que no estoy donde empecé hace unos años, pero he llegado a donde hoy estoy por un camino que no habría imaginado, lleno de cosas buenas, malas y peores, experiencias y aprendizajes; sea cual sea la meta a alcanzar, no dejemos de caminar sin perder el foco y disfrutar el paso a paso al andar el camino.
Siempre es bueno tener un horizonte claro, pero lo más importante será disfrutar el trayecto, entendiendo que cada momento es un final y un inicio.
Que alegría vivir en estos tiempos estelares.