El gobernador Julio Menchaca Salazar, desde el principio de su gestión subrayó la importancia de restaurar la Plaza Independencia y, desde luego, el Reloj Monumental, insignia de Pachuca desde las 23 horas del 15 de septiembre de1910. Ya prácticamente consolidado el proyecto, ha informado que, en números redondos, se invertirán 200 millones de pesos. Esfuerzo de tenacidad del mandatario que se recibió con sincero beneplácito de los nacidos en la Bella Airosa y de quienes, muchos también, aquí encontraron hogar para toda la vida.
Al paso de los años, se ha escrito mucho del amplio espacio que alberga al monumento. Entre otros, una revista especial aparecida en enero de 1988, de quien fungió como editor, Anselmo Estrada Alburquerque, lamentablemente ya desaparecido. Tituló su trabajo, en el que lo acompañaron expertos, Memoria del Reloj Monumental de Pachuca. Excelente.
Identificado amistosamente como Chemo, fuimos compañeros en El Sol de Hidalgo, y también vecinos en los condominios de la Aquiles Serdán; a pocos metros de distancia. En mensaje en la publicación, escribió: “…en consonancia con el Reloj, nos damos cuerda unos a otros para hacer realidad la conservación y el mantenimiento del monumento, la reposición del mármol del zócalo; la limpieza de la cúpula para darle su brillo cobrizo original, y en general, devolverle la belleza al símbolo de Pachuca”.
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En la última página, al final de un pequeño currículum, se apuntó: “ Miguel Estrada (abuelo de Anselmo) trabajó como contratista en obras de cimentación del Reloj Monumental de Pachuca”.
Aportaron valiosos puntos de vista, entre otros: Juan Manuel Menes Llaguno, Luis Corrales Vivar, Raúl Arroyo González, Jorge Martínez López, Andrés San Juan Hernández, Leoncio Medina Calderón, Víctor Manuel Ballesteros, Gerardo Partido Vite, Aída Suárez, Vicente Oropeza y Laura Elena Ríos.
También en otros capítulos no menos importantes como poesía: Genaro Guzmán Mayer, Benito García Torres, Rafael Cravioto Muñoz, Antonio Damián Núñez; pintores: Enrique Garnica, Bonfilio Salazar Mendoza y, fotografías: Martín Jiménez, Jesús Bermúdez Villegas, para citar a algunos.
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Guzmán Mayer, citó en el cincuentenario del Reloj, en 1960.” Creencia errónea de que la Torre Monumental es una copia de la Abadía de Westminster de Londres, porque esta no tiene campanas desde 1712”. Otro: “Fueron muchos los proyectos que se presentaron -para Pachuca- y se aceptó finalmente al arquitecto Tomás Cordero, como reza en la placa de mármol colocada en el interior del primer cuerpo de la torre”. Igualmente: “…fue hecha de cantera blanca de Tezoantla, pueblo enclavado a inmediaciones de Real del Monte”. Y explicó de personajes símbolos de nuestra historia ubicados en los cuatro costados de la estructura.
De la inauguración en 1910 “A las nueve y media de la noche, el Sr. Gobernador del Estado, D. Pedro L. Rodríguez – nacido en Oaxaca el 29 de junio de 1841-encabezó las tribunas”. Y tras un interesante programa, a las once de la noche, el gobernador vitoreó a la Patria y a sus héroes”. Alberto Dross, experto, fue nombrado para cuidar y conservar el reloj.
Como parte de esos tiempos, se detalla que don Alfonso Arteaga fue autor de las majestuosas águilas que ostentan las cuatro caras de la Torre.
Y así, aparecen artículos, enriqueciendo sobre todo el valor informativo de la revista, que pese a los calendarios es vigente, pero, cierto, imposible de encontrar.
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