En Hidalgo, el 2023 está a cuatro casos y tres meses de convertirse en el año con más feminicidios de los últimos tiempos, pues en nueve meses la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo (PGJH) inició 18 carpetas de investigación por este delito.
De acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), en el mismo periodo del año pasado, la entidad contabilizó 12 casos y cerró 2022 con 19 expedientes, por lo que está a un caso de alcanzar dicha cifra.
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Por otra parte, 2021, 2019 y 2018 fueron los años que más casos registraron por esa conducta ilícita en contra de las mujeres, con 21, 20 y 20, respectivamente.
Reconocen aumento de feminicidios en Hidalgo
Las estadísticas del SESNSP revelaron que de enero a septiembre de este año Pachuca y Tizayuca son los municipios que suman más incidencias, con tres cada una.
Mientras que Apan registra dos y Atotonilco el Grande, Chapulhuacán, Huasca, Huehuetla, Huejutla, Tecozautla, Tepeapulco y Tepeji del Río contabilizan un caso, respectivamente.
El encargado del despacho de la procuraduría, Santiago Nieto Castillo, reconoció que han incrementado los casos por feminicidio, pero aseguró que tienen un nivel de efectividad del 94 por ciento.
Esto debido a que se logran vinculaciones a proceso y sentencias condenatorias de casi todas las denuncias que se presentan.
“Cuando hablo de que tenemos el 94 por ciento de efectividad en feminicidios, es porque de 18 casos (denuncias), tuvimos 17 (judicializados) y de 24 que van en esta administración, hay 23 tanto con vinculación a proceso como resueltos de los que se denuncian”, precisó.
Feminicidas en Hidalgo, parte del núcleo de las víctimas
Nieto Castillo puntualizó que a diferencia del Estado de México donde hay feminicidas seriales, en Hidalgo los agresores son básicamente los hijos, compañeros de clase, esposos, exesposos, concubinos, exconcubinos o novios, lo que refleja que los autores del crimen se encuentran en el entorno inmediato de la víctima.
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En ese sentido, Nieto Castillo afirmó que a partir del uso de Protocolo de Actuación con perspectiva de Género para la Investigación del Delito de Feminicidio lograron identificar dos casos de feminicidio que quisieron hacer pasar como accidente o suicidio.
Recordó que el primer caso fue el de un transportista que atropelló a su pareja, pero quiso hacer pasar el caso como accidente. Sin embargo, derivado de las investigaciones bajo el protocolo de feminicidio se evidenció que el hecho fue premeditado.
El segundo caso fue de una persona que simuló que su expareja se había colgado de una cuerda, pero también se pudo acreditar que fue feminicidio, toda vez que el cuerpo ya no contaba con signos vitales al momento de ser suspendido con la soga.
“El seguimiento del observatorio de muertes violentas de mujeres nos demuestra nuestras debilidades en las investigaciones y eso nos permite mejorar”, sentenció.
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