Parece prometedor el inicio del dialogo entre autoridades y la comunidad estudiantil que mantiene en paro a la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) en medio de dudas y señales de provocación ordenados por Gerardo Sosa Castelán que se niega a perder el control de su fuente de poder político y económico, en las que la representación del alumnado debe tener cuidado, el clan dominante desde 1982, no entregará la plaza.
Lo que parece un error del movimiento estudiantil surgido en el Instituto de Artes es no haber creado un Consejo General de Huelga para articular demandas y propuestas integrales para no abordar la problemática particular de cada instituto o campus, porque las autoridades quieren mesas en diferentes campus para desarticular el movimiento con sus viejas prácticas para cooptar o bien amagues de represión no obstante el compromiso público del rector Octavio Castillo Acosta.
Puedes leer: De la FEUH al CEUEH
En el 2003 cuando Alejandro Rosas García presidente de la Federación de Estudiantes Universitarios de Hidalgo (FEUH) no se sometió a la voluntad de Gerardo Sosa Castelán, este permitió que el 9 de enero organizara el congreso Somos Diferentes como muestra de apertura, pero en mayo lo desconocieron y desaparecieron los expedientes de Alejandro Olvera, Roxana Montealegre y Leodegario Hernández.
El entonces secretario general de la UAEH Enrique Macedo Ortiz, negoció con ellos para que pudieran terminar sus estudios, los dos primeros cooptados sirvieron a los intereses del Clan Sosa, mientras Leodegario Hernández concluyó sus estudios y mantuvo su ruta además de su trayectoria profesional fue regidor en Huejutla por el PRD, secretario del Concejo Municipal de Pachuca y magistrado electoral.
Te recomendamos: Lana ¿y la estructura?
Por ello, las autoridades universitarias horas antes del encuentro, lanzan una propuesta unilateral de recalendarización del semestre y la titular de la Defensoría Universitaria, nombrada porque es leal al clan, a quien ha servido hasta como directora del desaparecido periódico El Independiente, solo pidió que el Consejo Estudiantil renueve dirigencia y la destitución de Esteban Rodríguez empantana las negociaciones, lo innegable es que el movimiento deja un histórico precedente.