El delegado en Hidalgo de los Programas para el Bienestar, Abraham Mendoza Zenteno, informó que lleva poco más de un año y medio insistiendo a las autoridades estatales y federales autorizar el uso y traslado de biosólidos de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) de Atotonilco de Tula; sin embargo, hasta el momento no se ha podido concretar el proyecto por falta de permisos.
En conferencia de presa, explicó que hay 5 mil millones de toneladas de lodo (biosólido) que pueden ser utilizadas en campos de cultivo para ayudar a que la tierra sea más fértil, a mejorar el suelo y contrarrestar los efectos de la sequía.
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“Si el gobierno del estado tomara la distribución en sus manos, sería bueno, porque habría biosólidos para el mejoramiento de suelos… es algo que no se acaba y se sigue almacenando, no consideramos correcto que mientras en otras plantas del mundo se usa para eso, acá en México solo se vea y no se use”, recriminó el funcionario federal.
No obstante, refirió que, si bien la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales de Hidalgo (Semarnath) está trabajando en dar los permisos correspondientes, ya pasaron dos ciclos agrícolas; es decir, dos periodos de crecimiento de algún cultivo en específico, y los productores no pudieron hacer más fértiles sus parcelas.
Además, aunque ya se comprobó la inocuidad del material, la dependencia aún no emite los permisos de uso y transportación, pues ya cuentan “con luz verde” para su uso.
Por otra parte, aseguró que Conagua, Sader y otras instancias, así como expertos en la materia, han revisado los biosólidos de la PTAR y los han calificado favorablemente, por lo que consideró que hace “falta voluntad política” para hacer echar andar el proyecto.
Según un estudio realizado por diversas instancias federales, la planta de tratamiento contaba hasta el año pasado con 2 mil 300 millones de metros cúbicos de biosólidos, los cuales representan con valor de 5 mil millones de pesos; la producción diaria es de entre mil 200 a mil 400 metros cúbicos de biosólidos.
Mendoza Zenteno reiteró que el uso del fertilizante que entregan a través del programa federal y el uso de biosólidos podrían hacer que las parcelas sean más fértiles y que se produzca mejor alimento en el campo hidalguense; sin embargo, de continuar sin respuesta, el abandono de las tierras seguirá creciendo.
“Año con año las parcelas deberán mejorar y tener plantas más resistentes a la problemática de la sequía”, puntualizó.
Respecto a la entrega de fertilizantes, informó que en lo que va del año beneficiaron a 51 mil 082 productores de maíz, frijol y milpa, lo que representa 23 mil 428 toneladas de producto entregado y un avance del 90.53 por ciento.
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Respecto al 9.5 por ciento restante, dijo que no se entregó debido a que los beneficiarios registrados fallecieron, migraron al extranjero o a otro estado del país, por motivos de salud no asistieron y, la mayoría, por no tener en qué transportar el fertilizante optaron por no recogerlo.
No obstante, en este último caso la delegación de Bienestar ayudó a algunos a transportar el producto a sus lugares de origen o acercarlos lo más posible, por lo que la cobertura pasó del 80 por ciento al 90 en tres semanas.
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