El juez Oscar Barrones Castillo dictó fallo condenatorio en contra de Jaime R.U., elemento de la policía estatal adscrito al C5i, por el delito de violencia familiar equiparada ejercida a su expareja Aidé “N” en febrero de 2020.
Sin embargo, la víctima teme que el servidor público en activo pueda tomar represalias en su contra, toda vez que aún se encuentra laborando en centro de control y comandos, lo que la haría estar en un estado de indefensión.
“Cómo mi agresor puede continuar trabajando en el C5i, haciendo uso de las cámaras, él debió ser cesado mientras se realizaba la investigación y de ser encontrado culpable que no siga en la corporación. Tengo miedo, porque a partir de esta sentencia condenatoria y que él pierda todos sus privilegios en el C5i, pudieran haber situaciones que pudieran repercutir no solamente en mí sino en mi familia y espero que eso no ocurra ni con mis amigas”, dijo la víctima.
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Animismo, agregó que van a llevar a cabo una queja colectiva para que se elabore un protocolo de atención a victimas de violencia, ya que lamentó que la perito en psicología, después de realizarse las pruebas, haya determinado que no presentaba signos de haber sido víctima de violencia familiar, aunque sí se encontraba a la defensiva con su expareja.
De acuerdo con la relatoría de los hechos, el 18 de febrero de 2020 Aidé y su expareja Jaime se dirigían a la tienda Walmart a realizar algunas compras, pero cuando esta le recriminó que convivía poco tiempo con su hijo por ir al póquer, billar y clases de carpintería, el hombre reaccionó agresivamente y condujo su camioneta de regreso a la casa que habitaban en Mineral de la Reforma.
Al llegar, Jaime comenzó a sacar su ropa del closet y su expareja le pidió que no se fuera, por lo menos hasta que pasara el cumpleaños de su hijo; sin embargo, este la empujó y provocó que se golpeara la cabeza y el codo, por lo que al salir el hombre de la casa para subir algunas de sus cosas a su auto, ella cerró la puerta, lo que provocó la ira del sujeto y comenzó a patear la puerta e insultarla.
Aidé llamó a su padre para comentarle la situación y este puso el altavoz para que su esposa escuchara los gritos de Jaime y los golpes a la puerta. Ante esta situación, los padres de la víctima acudieron al domicilio de su hija y la encontraron llorando, mientras que el padre de su hijo ya no estaba.
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Por otra parte, Aidé refirió que el 25 de marzo de 2020 también inició una carpeta de investigación en contra de Jaime por haber golpeado en la cara a su hijo; sin embargo, la jueza Rosalba Cabrera le concedió la suspensión provisional, lo que consideró la madre del menor una mala actuación.
“Ahí hay corrupción, porque el monto de la pena no alcanzaba para la suspensión, hay corrupción en el sistema de impartición de justicia. La magistrada quitó el agravante por su vínculo (padre e hijo) y que es menor de edad, para que el monto alcanzara para la suspensión provisional”, refirió.
No obstante, interpuso un amparo y una queja para que situación se revise y alcance la justicia.
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