En las inmediaciones del mercado Primero de Mayo de la capital hidalguense, se han instalado diferentes puestos con venta de cohetes, los cuales son atendidos, en algunos casos, por niños de 10 a 11 años de edad, lo que representa un peligro tanto para ellos como para los transeúntes.
En un recorrido llevado a cabo por La Jornada Hidalgo se constató que el centro de Pachuca está saturado de compradores a pesar de la pandemia.
No sólo eso, también se pudo observar que niños de 10 a 11 años de edad atendían un par de puestos de cohetes enfrente de la entrada principal del mercado, a pesar de la presencia de oficiales no muy lejos de ahí.
Una niña en pants rosa ofrecía bengalas, ratones y cohetones a los marchantes justo en el acceso del mercado, con bandejas puestas sobre banquitos de plástico.
A unos metros de allí, en el acceso a los puestos que están a un costado del mercado, también había cuatro puestos ambulantes con venta de pirotecnia sin ningún control, donde niños pequeños manipulan cohetones, chifladores y cañones, ante la mirada complaciente de las vendedoras, los cuales son peligrosos por el riesgo de quemaduras o amputaciones que pueden provocarles.
Durante la caminata se ubicaron más puestos con venta de pirotecnia en la calle de Ocampo, exactamente enfrente de la cantina El Regio, donde también había dos niños menores vendiendo cohetes, con el riesgo que implica para su integridad.
Justo en el recorrido, una persona no identificada intentó amagar al representante de la prensa al ver que observaba la venta de cohetes.
Esta situación se dio ayer, justo cuando en su cuenta personal de Twitter el gobernador Omar Fayad, advirtió que los juegos pirotécnicos no son un juego.
“Evitemos accidentes en esta época, cuídate y protege a tu familia”, fue el mensaje que publicó Fayad en su red social, como parte de su campaña Invierno Seguro, en la que advierte que la pirotecnia puede causar lesiones graves e incluso la muerte.
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