Gobierno de Mixquiahuala suspende puesto emblemático de sopes

Doña Elia Ramírez Martínez desde 1970 tiene un puesto de sopes, tacos, quesadillas y pambazos a un lado del mercado de Mixquiahuala, el pasado 15 de noviembre, su familia la convenció de renovar su estanquillo, batallaban en la época de lluvias y con los transporte de carga en los establecimientos vecinos.

A sus 67 años de edad, ahorró varios años para mejorar la presentación a cientos de clientes. Para su sorpresa, al estar colocando su estanquillo, Protección Civil llegó y lo suspendió antes de abrir.

“En años anteriores, al cambiar estanquillos de los vecinos, no había problema, no pedían permiso ni nada, ya le habíamos comentado de la renovación al Secretario Municipal, llegó el día de colocarlo, estábamos en eso, de repente llega Protección Civil y nos dice que teníamos que dejar el paso, a un lado hay un puesto que tampoco tiene paso, a unos pasos hay un estanquillo que tapa el paso del peatón todos los días, nadie de las autoridades les dice nada”, comentó Marlén Mera Ramírez, sobrina de la afectada.

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Del puesto dependen seis personas para sustentar a su familia, entre ellas dos madres solteras.

Para solucionar el problema, tuvieron que cortar su estanquillo y perder algo de sus ahorros. Dejar más días sin trabajar, lo que significa no poder llevar el pan a su hogar.

Doña Elia está triste, hace unos meses recibió la famosa “Banda Mixquiahualense”, reconocimiento a personas destacadas del municipio y ahora que busca una solución ante José Ramón Amieva, presidente municipal, no los dio la cara, mencionaron sus familiares a La Jornada Hidalgo.

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“Buscamos al presidente y no tuvimos éxito, el Secretario Municipal, no pudo solucionar, queremos que sean parejos, sí todos obstruinos el paso, todos debemos ser regulados. De qué sirve la banda que le dieron, cuando uno pide ayuda, no te atienden”, dijo su sobrina Marlen.

Elia seguirá deleitando a sus clientes con sus sopes y garnachas, solo tendrá esperar más días para remodelar su aún nuevo estanquillo. Eso sí, le quedará la tristeza que su presidente y autoridades, no miden con la misma moneda además que no dio la cara cuando lo necesitaba.

Por Gerardo Campa