A partir de mañana, estamos a cinco días de que Julio Menchaca Salazar tome posesión como nuevo gobernador de Hidalgo. Esto ocurrirá el próximo lunes, con el valor agregado de ser la primera ocasión en algo así como 90 años en que un partido hegemónico de pasadas décadas, el PRI, ceda el poder a otro más joven que es Morena.
Esto se planteó desde que se inició el proceso de cambio, que tuvo como fecha definitoria el pasado 5 de junio, en que se realizó la elección.
La oponente postulada por el Revolucionario Institucional fue Carolina Viggiano, secretaria general a nivel nacional del partido. Se arropó en la coalición del tricolor PAN y PRD Va por Hidalgo. Menchaca, a su vez, fue portavoz de otra alianza, Juntos Hacemos Historia, sumando a PT y Panal. También participaron el Partido Verde de México (PVEM), que captó 12 mil 205 sufragios, y Movimiento Ciudadano, incorporando 32 mil 793.
La asistencia a las urnas fue persistente hasta las 18 horas, sin registrarse incidentes que pusieran en entredicho la legalidad de los sufragios.
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Al final, esperado conteo enfatizó una mayoría de los morenistas con 658 mil 562 votos, por 335 mil 531 de su oponente.
Cifras totales de las 18 actas de cómputo distrital, y números menores, pero no menos significativos de quienes estaban prisión preventiva, por primera ocasión pudieron ser participantes activos.
En esta jornada se sumaron más de 27 mil funcionarias y funcionarios de Mesas Directivas de Casillas así como representantes de los partidos políticos, 613 observadores electorales y 144 que fueron parte de los Consejos distritales.
Tras un conteo rápido se ratificó lo que esperaban los observadores, y de esta forma Menchaca Salazar dirigirá los destinos de su estado desde el 5 de septiembre de 2022 al 4 de septiembre de 2028.
Posteriormente se inició el proceso entrega recepción, involucrando a las más significativas áreas de la administración. En pocas palabras para que el nuevo gobierno supiera como se encontraba en todos los órdenes la gestión que el aún mandatario Omar Fayad Meneses entregaba.
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Menchaca Salazar, quien escogió a quienes lo iban a representar, gente valedera de toda su confianza, precisó que no habría pactos de impunidad.
Afirmó que no se limitaría a solo firmar papeles, pues se auditaría todo. Fue claro: “Va implícito mi proyecto y mi prestigio”, enfatizando que no le temblaría la mano para sancionar a quien resultara responsable en la comisión de algún ilícito.
También salió al paso de imputaciones de misógino. Aquí dijo que una estrategia de Viggiano fue aprovechar su condición de mujer y tratar de involucrarlo en acciones de misoginia, aunque sin tener buenos resultados para ella. “Fui senador feminista y como gobernador también lo haré”.
Al referirse a las acciones preponderantes de su sexenio, enlistó: combate a la corrupción y a la inseguridad, disminución en la pobreza, creación de empleos, salud con mejoramiento de servicios, combate al robo de combustibles y mejoramiento en vías de comunicación.
Y con este protocolo, falta solo el conocer el gabinete que acompañará al nuevo Ejecutivo estatal.
Se han filtrado algunos posibles nombres de quienes han estado cercanos a Menchaca Salazar pero ninguno aún avalado oficialmente. Sobre eso, en una plática con él, ratificó que se respetaría la paridad de género. Es hombre de palabra. A poco estamos de conocer quiénes serán los ungidos.