Hace unas semanas durante una plática que sostuve con el gobernador Omar Fayad Meneses le pregunté sobre las opciones que veía en su futuro político después del 5 de septiembre, porque mientras unos juran y perjuran que anticipadamente pactó una embajada con el gobierno de Andrés Manuel López Obrador a cambio de no meter mano en las elecciones, otra ventana de oportunidad se abría para el mandatario hidalguense cuando una ráfaga de audio escándalos le estallaron en la cara al dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas.
Entonces, se le multiplicaron los enemigos a ‘Alito’, en su propio partido exgobernadores, exdirigentes, diputados y senadores pidieron su cabeza.
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Incluso el exgobernador hidalguense Miguel Ángel Osorio Chong pidió al PAN y al PRD suspender cualquier acuerdo o negociación con el líder priista por carecer de capacidad para tomar decisiones.
El sisma priista era la oportunidad esperada por muchos, sobre todo por los hidalguenses para arrebatarle el PRI a Alito, entre ellos la secretaria general, Carolina Viggiano Austria, el propio Osorio Chong, y por qué no, Omar Fayad, quien me confió que si Moreno renunciaba voluntariamente y “si hubiera piso parejo”, buscaría la dirigencia nacional tricolor.
El tema volvió a ser puesto sobre la mesa el pasado sábado cuando Fayad se reunió con la estructura del PRI, donde en tono irónico el mandatario hidalguense apuntó que para los que lo veían en una embajada no andaban tan perdidos, pues en unos días “se dedicará de tiempo completo a ser embajador, pero del priismo hidalguense”, lo cual podría interpretarse que después de cerrar su ciclo como gobernador iniciará una campaña.
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Fayad ha sido duramente criticado por su cercanía y condescendencia que algunos califican de entreguismo hacia el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien precisamente busca que la oposición no exista, o sea encabezada por personajes afines a él, y el gobernador priista cumple ese requisito.
El discurso de Fayad, -dicen- no le agradó nada a la secretaria general, Carolina Viggiano, ni al exsecretario de Gobernación, Miguel Osorio, mucho menos a Alito, con quien tiene cuentas pendientes.
@AlexGalvezQ