El 19 de noviembre del año pasado, la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, durante 85 minutos ejerció estatutariamente todos los poderes de la presidencia. El mandatario Joe Biden fue anestesiado por la que se llamó colonoscopia de mínimo riesgo.
Este procedimiento es un examen que se utiliza para detectar cambios o anomalías en el intestino grueso (colon) y el recto.
Harris entró en la historia al ser la primera negra y también primera de descendencia asiática en tomar, aunque en forma transitoria, las riendas de Norteamérica.
Para muchos significó algo así como recordatorio de que pudiera ser la lógica sucesora de Biden, aunque en el tema no se ha insistido. Antes, Hillary Clinton, muy preparada, estuvo en un tris de ser presidenta.
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Su nombre completo es Kamala Devi Harris, nacida en Oakland, California, el 20 de octubre de 1964. Su padre, Donald Harris, profesor de economía de la Universidad de Stanford, emigró de Jamaica en 1961. Su madre, Shyamala Gopalan, se destacó como científica especializada en cáncer de mama. Llegó a Estados Unidos en 1960, procedente de Madrás (hoy Chennai). Perseveró al imponerles a sus hijas nombres sánscritos derivados de la mitología hindú para que no se olvidara su identidad cultural.
Kamala destacó como exitosa abogada y política. Nadie dudó de sus méritos. Un miércoles, 20 de enero de 2021, asumió sus funciones de vicepresidenta al lado de Biden. Más adelante, en una entrevista, fue contundente al declarar:” Soy negra y estoy orgullosa de ello”. En alguna forma vivió las crudezas de las discriminaciones raciales.
Integrante del Partido Demócrata, anunció oficialmente su campaña para postularse a la nominación para presidenta de los Estados Unidos en las elecciones de 2020, sin embargo, el 11 de agosto de ese año, Biden anunció que Kamala le acompañaría como aspirante a la vicepresidencia.
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Pero no quedó ahí el reconocimiento tanto tiempo postergado a las mujeres de color. En abril de este 2022, Ketanji Brown Jackson fue la primera mujer negra que se sumó a la Suprema Corte de Estados Unidos.
Para entender lo que esto significa, en algo más de 200 años ha habido 115 jueces en la Suprema Corte y de estos, 108 han sido hombres blancos. En ese lapso 5 fueron mujeres blancas y dos varones de color.
Jackson asumirá su cargo a finales de este año ocupando el puesto del juez saliente Stephen Breyer.
Apuntó: “Y nuestros hijos me dicen que ahora ven, más que nunca, que aquí, en Estados Unidos todo es posible”.
Pero hubo otra designación insospechada cuando Joe Biden nombró a Karin Jean-Perre nueva portavoz de la Casa Blanca, responsabilidad de alto perfil conferida a una mujer de color y lesbiana. Reemplazó a Jen Psaki, bajo la cual trabajó como adjunta.
La nueva secretaria de prensa nació en Martinica, de padres haitianos que emigraron al vecino país del norte. Jean-Pierre estuvo en las dos campañas de Barack Obama (2008 y 2012) y en la de Biden.
Llamada francófona, de 44 años, se graduó en la Universidad de Columbia. Comparte su existencia con una periodista de la CNN con quien tiene una hija.
Y el epílogo apenas lo escribió Francia Márquez, quien será vicepresidenta de Colombia, al lado del mandatario de izquierda Gustavo Petro. Iniciarán su gestión el 7 de agosto.
Márquez, de 40 años, la afrocolombiana, fue madre soltera desde los 16 años. Ha sido un ejemplo la forma en que ha avanzado.